¿Sorteo amañado?

Esta mañana he tenido la oportunidad de ver en diferido el vídeo del sorteo de los octavos de final de la Champions League a través de la página oficial de la UEFA (uefa.com).

El <font color=""FF0000""><b>vídeo</b></font>, me ha llamado bastante la atención por un detalle que paso sin más preámbulos a relatar:

Minuto 10:50 del vídeo. Los operarios de la UEFA encargados de llevar el sorteo -cuyos nombres desconozco absolutamente- se disponen a extraer la bola con el nombre del equipo cabeza de serie que habrá de enfrentarse al Celtic de Glasgow. El realizador de televisión mantiene un primer plano de los delegados del equipo escocés, asistentes al evento que, pudibundos ellos, sabiéndose enfocados por las cámaras, intentan mantener la compostura a pesar del color de sus mejillas sonrojadas por el néctar de avena que hermana a tantos y tantos británicos. Todo en orden; o al menos eso parece.

Al margen del sospechoso método de emparejamiento (urnas independientes de todos los campeones de grupo con varias bolas que nadie nos asegura que contengan sólo papeletas del equipo que etiqueta la urna en la que están) y de las caprichosas normas impuestas por la competición que impiden que dos equipos del mismo grupo o país se enfrenten entre sí, el sorteo transcurre sin mayor trascendencia ante la atenta mirada de los representantes de todos equipos clasificados. Sin embargo, de pronto ocurre algo bastante extraño.

El encargado de remover y extraer las bolas de los equipos clasificados como primeros de grupo permanece completamente concentrado en el bombo mientras su compañero va depositando de dos en dos cada una de las bolas (algo ya de por sí extraño, porque no se entiende que la persona encargada de extraer las bolas pueda ver y vea con tanto interés cómo se introducen en riguroso orden cada una de las bolas), de repente dubita cuando el compái suelta las dos últimas. ¿Por qué? ¿Es que ha perdido de vista la bola que tenía que sacar? La reacción es digna de ser vista varias veces. El hombre se pone bastante nervioso y al introducir la mano en el bombo, hace un gesto con el dedo índice apuntando una de las bolas, como buscando la confirmación de su ayudante, que sin poder hacer nada, contempla la situación a su lado. Resultado: AC Milan - Celtic de Glasgow.

En fin. La verdad es que después de ver el vídeo me quedan muy pocas dudas acerca de la limpieza del proceso con el que se lleva a cabo el sorteo. Es por todo ello que considero que el asunto debería ser tratado seriamente por los medios de comunicación, especialmente teniendo en cuenta el enorme interés que el fútbol despierta a nivel mundial.