VILLARREAL

Sansone, el goleador que no quiso ser frutero

El nombre de Nicola Sansone ha dado la vuelta al mundo por su golazo a la Real Sociedad desde el centro del campo. Una tarjeta de visita de lujo para uno de los 'rookies' de La Liga Santander

Lluís Payarols

La tarde del 18 de septiembre de 2016 la recordará durante mucho tiempo un futbolista de 25 años que por circunstancias de la vida nació en Múnich pero que se siente italiano por los cuatro costados. Le viene de familia, aunque no quiso seguir los pasos de su padre, vendedor de frutas y verduras en la localidad bávara.

"Ayudé a mi padre dos semanas y tuve claro que no quería dedicarme a ello. Es muy duro", declaró en una entrevista concedida tiempo atrás al 'Corriere Della Sera' Nicola Sansone, el héroe inesperado del inicio de Liga en el Villarreal, renunció a los productos del campo para brillar en otros campos, como El Madrigal. Dejó con la boca abierta a su actual afición cuando sorprendió a Rulli a 53 metros de distancia de la portería de la Real Sociedad, en el que fue su segundo gol de la jornada y el que dio la victoria a los de Fran Escribá (2-1).

2016 es un año muy especial para este extremo derecho que se formó en los equipos interiores del Bayern Múnich pero que pronto se enroló en diferentes equipos italianos como el Crotone, el Parma o el Sassuolo, la revelación de las últimas ediciones de la Serie A. Sansone fue una de sus estrellas y este verano firmó dos contratos. El más importante a nivel personal, el que le unió a Vanessa, su esposa desde el pasado 16 de julio. Y a nivel deportivo, el que rubricó con el Villarreal, que abonó 13 millones de euros al Sassuolo para atarle -deportivamente hablando- hasta junio de 2021. Cinco temporadas en total.

Con 25 años cumplidos el pasado día 10, Nicola Sansone ya ha marcado tres goles con la camiseta amarilla en La Liga Santander. Su mejor marca en una competición de la regularidad la firmó la temporada pasada en el Sassuolo, con 7 dianas. No es un ariete rompedor. Para eso están otros jugadores en el equipo de Fran Escribá. Sin embargo, con dianas como la de este domingo ante la Real demuestra que no se equivocó en su decisión de dejar la frutería. Lo suyo son los 'pepinazos' bien dirigidos. Y si no, que se lo pregunten a Rulli...