La resurrección del setienismo

Tras un arranque de campaña en tono gris (13 puntos sumados de 33 posibles), el Real Betis vuelve a estar de moda. Y no es casualidad, porque los verdiblancos han sumado doce puntos en las últimas cinco jornadas y en un abrir y cerrar de ojos han ascendido desde la decimocuarta posición que ocupaban en la tabla hace unas semanas hasta la quinta. 

Los motivos son varios, pero el principal tiene nombre y apellido: Quique Setién. El técnico cántabro ha seguido siendo fiel a sus ideales a pesar de los resultados adversos y el tiempo ha terminado por darle la razón. Le llovieron palos en el Benito Villamarín después de encadenar tres derrotas ante Atlético, Valladolid y Getafe. Él, sin embargo, ni se inmutó. Setién sabe que a veces el camino más corto entre dos puntos no es la línea recta y de ahí no se mueve: el estilo es indiscutible.

Quizás la situación no se hubiera revertido sin el golpe sobre la mesa que los heliopolitanos dieron en el Camp Nou imponiéndose al Barça por 3-4 con goles de Junior, Joaquín, Lo Celso y Canales. Sirvió ese triunfo de punto de inflexión y de chute de moral para una plantilla que hasta entonces deambulaba sobre el campo sin confianza. A partir de ahí, tres victorias en cuatro partidos en LaLiga y boleto sellado para la siguiente ronda de la Europa League, competición en la que este año tiene depositadas muchas esperanzas la afición bética por aquello de dar de su propia medicina al Sevilla, eterno archienemigo.

Buena planificación

Otra de las causas que explica la resurrección del setienismo es el despertar de las estrellas del equipo. Entre ellas se encuentran William Carvalho, Lo Celso y Canales, quienes en las últimas semanas han dado un paso hacia delante. El ex de la Real Sociedad y el argentino, sin ir más lejos, dejaron huella este pasado fin de semana en el RCDE Stadium del Espanyol dando una lección magistral de fútbol ante un rival que no le puso las cosas nada fáciles. Del mediocentro luso qué decir. El fútbol que tiene en sus botas se pudo ver en el Camp Nou, donde recordó en muchas fases a esos pivotes de la vieja escuela al estilo Mauro Silva. Pau Torres, Sidnei e Inui también están ofreciendo un rendimiento espléndido en estos tiempos de bonanza. Son días felices en Heliópolis.

Será el calendario, no obstante, el encargado de medir las aspiraciones béticas. Eibar y Huesca, los dos próximos contrincantes, parecen teóricamente asequibles. Después llegará el Real Madrid, y Girona y Athletic cerrarán enero. Ahí se podrá saber de qué material está confeccionado este Betis. Y si el setienismo es o no una modapasajera.