Las claves de la reunión de los capitanes de LaLiga sobre la vuelta a la actividad

Los capitanes analizaron la situación del fútbol

Los capitanes analizaron la situación del fútbol / AFE

Ramón Fuentes

Ahora que la vuelta a la actividad está más cerca que nunca, se presenta un nueve foco de conflicto entre los jugadores y la patronal por las concentraciones que estos quieren llevar a cabo, como aislamiento ante un posible virus. Con un mínimo de quince días, pudiendo incluso ser más, en la cuarta fase del protocolo de vuelta a la actividad correspondiente a los entrenamientos colectivos. 

Cerca de cuatro horas duró ayer la reunión de los capitanes de Primera división, después de la realizada el pasado fin de semana con los respectivos de la Segunda, y donde estos volvieron a dejar claro que la salud está por encima de todo lo demás además de insistir que no están de acuerdo con estas concentraciones. La salud fue el tema principal de debate y en este aspecto hay unión absoluta en que es la cuestión fundamental en estos momentos. Mostraron nuevamente su gran preocupación, por la situación que vive la sociedad en general, y en particular por las condiciones sanitarias que se encontrarán cuando vuelvan a la actividad si así sucede finalmente. Hasta el punto que quieren que sea el Ministerio de Sanidad el que dé el ok definitivo para volver a la actividad.

Tanto es así que tienen previsto trasladar estas preocupaciones, tanto respecto  a la autorización sanitaria como el asunto de las concentraciones, tanto al Ministerio de Sanidad como al propio CSD porque consideran que son una parte muy importante y que su palabra debe ser escuchada en todo momento. La otra gran preocupación gira en torno a los casos positivos. El Protocolo de la Liga fija que, en caso de aparecer un caso positivo en la plantilla, se le aísla del resto conforme a lo que establece las autoridades sanitarias. Los jugadores entienden que todo el equipo debería quedar en cuarentena. 

Hasta el punto son contrarios a las concentraciones y esta cuestión derivada por la aparición de un positivo,  que se debatieron temas jurídico relacionados con esta situación como también cuestiones relacionadas con los riesgos laborales. Es tal su posición respecto a la seguridad sanitaria y el asunto de las concentraciones, que nada se habló del calendario.

La Liga defiende su protocolo de vuelta

Veremos porque esta postura choca frontalmente con la que defiende la Liga que en este momento no tiene intención alguna de modificar este Protocolo al cual dio el visto bueno su Comisión Delegada el pasado 13 de abril y desde el pasado viernes ya tienen en su poder todos los clubes del fútbol profesional. Así nos lo confirman a SPORT varias fuentes consultadas. 

Un protocolo que, como ya explicamos el pasado domingo con todo detalle, recomienda una concentración en las residencias de los clubes o en hoteles   "con el objetivo de crear un espacio lo más aislado y controlado posible, se recomienda a los clubes por optar por concentraciones en las ciudades deportivas u hoteles de uso exclusivo por parte del club".  A estas instalaciones deberá desplazarse a todo el personal imprescindible, considerándolas de "Protección alta".

Esta instalación acogerá la fase última de preparación de todo el equipo e incluso también la fase de grupos previa. Un mínimo de quince días que no apoyan los jugadores, que incluso tampoco los siete días. Quieren poder seguir la rutina de estar con sus familias mientras que la liga entiende que es la única forma de estar aislados frente al virus. 

Una concentración donde, conforme al protocolo, quedan regulados todos los aspectos, empezando por los desplazamientos, además de un regimen muy estricto de control de los desayunos, comidas y cenas. El Protocolo también establece que el tiempo que los jugadores no estén entrenando (o fuera de los horarios de comidas) deberán estar en las habitaciones siempre individuales porque entiende que "de esta forma se reduce el riesgo de contagiarse y se mantiene el aislamiento social más estricto "quedando totalmente prohibidas "las reuniones, ya sea en zonas comunes o habitaciones".