Europa ya espera al mejor Granada de la historia

Lunes de pellizcos de incredulidad en La Alhambra, lunes de euforia en El Albaicín, lunes de sonrisas en el Generalife. Granada vivió ayer una jornada histórica, la resaca más dulce después de sellar el club nazarí la mejor temporada de su historia.

El equipo de Diego Martínez logró su mejor clasificación en Primera, séptimo, su mejor puntuación con 56 y un histórico billete para la próxima edición de la Europa League. Por primera vez, los rojiblancos pasearán su zamarra de líneas horizontales por el viejo continente.

Es el éxito de trabajo, de la constancia y del sentido común para el tercer menor presupuesto de la Liga Santander. Y tiene un nombre, Diego Martínez. El entrenador más joven de Primera escribió otro hito en una corta pero fulgurante carrera en los banquillos.

Vigués, y sin haber cumplido aún los 40 años, el míster -curiosamente con Penas como segundo apellido-, este experto en alegrías cogió las riendas del conjunto nazarí en Segunda y en apenas dos años lo ha puesto en el firmamento continental. Tras lograr el ascenso en su primera temporada en Los Cármenes, el reto se presentaba mayúsculo, pero el jugador y su plantilla han logrado una matrícula de honor que quedará en la historia de la entidad.

El Granada, después de las experiencias con el entramado de los Pozzo, está ahora en las manos de un millonario chino, Jiang Lizhang, al que no se ha visto en la ciudad en los últimos meses. Ni falta que ha hecho, ya que una plantilla en principio llamada para luchar por la salvación, con muchos debutantes en la categoría pero con el refuerzo de algunas piezas clave en veteranía como Roberto Soldado, Yangel Herrera o Gonalons, pronto dio señales de funcionar como un reloj suizo.

Así, con el 5-3-2 de Diego bien inculcado y con un grupo de hombres más que de nombres, el Granada se permitió incluso el lujo de liderar la tabla en la décima jornada. Después llegarían más éxitos como esa semifinal de Copa, con el equipo a punto de eliminar al Athletic tras una andadura sensacional, mientras en Liga nunca llegaba el desplome de los agoreros. Al final, otro histórico 4-0 al Athletic de Bilbao en la última jornada selló la mejor campaña de la historia en Los Cármenes. Granada es más feliz que nunca con su equipo.