Hinako Shibuno 'conquista' el British con su juego y su sonrisa

Shibuno celebra la victoria en Inglaterra con una gran sonrisa

Shibuno celebra la victoria en Inglaterra con una gran sonrisa / sport

Ramon Palomar

Ramon Palomar

El golf femenino mundial ha descubierto a una joven nipona, que además de lograr este domingo su primer torneo ‘Grande’ en su primera participación, encandiló a los aficionados en en el Marquess Golf Club de Milton Keynes por su simpatía a lo largo del torneo.

Esta jugadora japonesa aterrizó esta semana en Inglaterra para jugar su primer torneo del Ladies PGA Tour, y el primer ‘Grande’ en su incipiente carrera, y sin hacer demasiado ruido, pero repartiendo sonrisas a diestro y siniestro, se llevó el triunfo en un final espectacular.

Shibuno dio toda una lección de cómo disfrutar del golf compitiendo al máximo nivel, con un juego quirúrgico, pegando lardo desde el tee, buenos hierros a green y segura con el putt, como el del 18 que le dio el triunfo.

Tranquilidad pasmosa

En ese hoyo, demostró una tranquilidad pasmosa e incluso compartió risas con su caddy, y entrenador mientras el grupo de delante finalizaba el hoyo, usando más tiempo del debido. Pero a Hinako, no le tembló el pulso y lanzó un certero hierro dejándose un putt de cinco metros para ganar el torneo.

No anduvo con rodeos ni le dió demasiadas vueltas a cómo lo tenía que tirar. Se puso delante de la bola, y lanzó un certero putt, con decisión, que entró por el centro del hoyo, para ganar el torneo. Se abrazó a su caddie y lo celebró con todo el mundo, no le importó  a quién saludaba. Lo hubiera hecho con todos los que se cruzaban con ella.

Sin duda, un triunfo que ni ella misma podía soñar al principio de semana cuando se presentó al torneo en su primer año de profesional, y en su primer viaje fuera de Japón. Dos victorias en torneos de su país, le empujaron a probar en el British y…¡bingo!.

Shibuno se convierte en la segunda japonesa en ganar un ‘Major’, tomando el relevo a Chako Higuchi, que logró el LPGA Championship en 1977. Quizá su autentico sueño es ahora emular los éxitos de otra japonesa, Ai Miyazato, que fue número uno del mundo en 2010, pero que no logró un 'Grande' en los 53 intentos que tuvo. Ella ya lo tiene.