El Girona quiso pero no pudo

Albert Gracia

El Girona no pudo pasar del empate (0-0) ante un Leganés que le puso las cosas más complicadas de lo previsto. El conjunto de Eusebio, que quiso pero no pudo, encadena cuatro partidos consecutivos sin perder.  

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LaLiga

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Alineaciones
Girona
Bono; Ramalho, Bernardo, Muniesa; Pedro Porro (Juanpe, 91'), Aleix García (Granell, 81'), Pere Pons, Borja García, Planas; Roberts (Lozano, 56') y Stuani.
Leganés
Cuéllar (Lunin, 86'); Tarín, Omeruo, Siovas, Silva; Rubén Pérez, Recio; Ojeda (Nyom, 74'), Eraso (Santos, 73'), Óscar; Carrillo.

El Girona dominó en una primera mitad decepcionante. Los de Eusebio tuvieron la posesión y las ocasiones. Si se puede llamar así. Y es que un solitario disparo de Roberts tras una buena jugada individual fue una de las pocas aproximaciones con peligro por parte de ambos conjuntos. El centrocampismo se instaló en un partido en el que el Girona se encontró muy cómodo, al menos en los primeros minutos de encuentro.

Una circusntancia algo atípica para un equipo que está más acostumbrado a vivir de las contras y de los centros laterales. Aun así, y sin tener el balón, fue el Leganés el que inauguró el marcador. Carrillo aprovechó una jugada embarullada en el área para poner por delante a su equipo. No obstante, el árbitro no dudó e invalidó el tanto por fuera de juego del argentino.

El Girona, lejos de amedrentarse, siguió con su dominio, aunque faltó verticalidad en los metros finales. Los de Eusebio se dedicaron a tocar en la mediapunta pero sin poner en aprietos a Cuéllar. La primera mitad estuvo destinada al 0-0 desde el principio.  

En la reanudación, ambos conjuntos se animaron y ofrecieron un partido de ida y vuelta con numerosas ocasiones. El Leganés pasó a llevar la voz cantante del partido y apretó de lo lindo a un Girona que iba achicando aguas a la espera de responder con contundencia. Un cabezazo de Rodri y un lanzamiento de libre directo de Óscar pusieron en aprietos a un Bono que venía de exhibirse en Mestalla.

Aun así, el conjunto de Eusebio también tiró de carácter y se acercó con mucho peligro a la meta de Cuéllar. Stuani, con un gol que el árbitro anuló por falta del uruguayo, fue el que más lo intentó. Pero todavía daba tiempo para mucho más. Un tiempo en el que los palos se convirtieron en los protagonistas.

Uno para el Girona y otro para el Leganés. Silva estrelló su remate a la madera y el Choco Lozano hizo lo propio para desesperación de Montilivi. A partir de ese instante, las ocasiones disminuyeron aunque Santos pudo desatar la alegría para el Leganés en el descuento.