Cárcel: "Tenemos que estirar el chicle todo lo que sea posible"

El director deportivo del Girona no quiere lanzar las campanas al vuelo, aunque no es ajeno a la realidad y piensa que la mitad del trabajo está hecho, por lo que toca “replantearse los objetivos”

"Veo muy lejos lo que hizo el Leicester; otra cosa es que en la trigésima jornada estemos arriba...", señala el dirigente, quien confiesa que es difícil no tener miedo a la salida de Míchel

 Quique Cárcel, director deportivo del Girona

Quique Cárcel, director deportivo del Girona

Marc Brugués

Aunque parezca mentira, Quique Cárcel también ha aparcado la palabra "salvación" de su discurso. La culpa la tiene el rendimiento sublime del equipo que lidera Míchel, el hombre que "ha convertido todo el sufrimiento acumulado del club en éxitos", según reconoce el propio Cárcel en una entrevista con 'Diari de Girona', del mismo grupo editorial que SPORT, Prensa Ibérica.

Míchel se ha soltado y ya habla de luchar para estar entre el 4º y el 6º. Es decir, Europa. ¿Lo comparte?

Estamos en una fase donde con 31 puntos y siendo líderes hace que empecemos a replantear el objetivo tan claro que teníamos a principio de curso, que era la salvación. Toca empezar a pensar que tenemos que saber aprovechar el momento y estirar el chicle tanto como sea posible para luchar por algo que la temporada pasada tocamos y que este año, con estas sensaciones, tenemos que ambicionar. En esta guerra estarán equipos como la Real Sociedad o el Betis, que juegan competición europea y tenemos que saber aprovechar esta ventaja.

El año pasado dijo que no veía el club preparado para jugar dos competiciones. ¿Ahora sí? ¿Qué ha cambiado?

No es que haya cambiado nada. El primer paso que tenía que hacer el Girona era establecerse en Primera. Vivimos un episodio parecido hace cinco años. Tengo mucho respeto a la segunda temporada en la categoría y jugar dos competiciones es difícil. Somos un equipo muy virgen en este aspecto. Este inicio me hace pensar que consolidaremos el equipo en Primera y esto ya será un gran éxito. Y si estamos en Europa el año que viene, lo tendremos que asimilar y trabajar bien.

¿Hablar de permanencia es una pantalla pasada?

Lo celebraré cuando sumemos los 40-42 puntos. Tras 12 jornadas, tener 31 puntos y ofrecer estas sensaciones... No quiero pasarme de falsa modestia y considero que me toca decir que la salvación es un hecho bastante consolidado o cercano.

¿Quedar duodécimo o decimocuarto sería una decepción?

Si la sensación va de más a menos siempre será así. Al final, la ilusión que hay instalada en el club es máxima. La gente tiene que ver que no es realista lo que vivimos pero a la vez ser ambiciosa e ilusionarse.

El equipo está superando todas las expectativas. ¿Incluso las de quienes lo diseñaron?

Cien por cien. No podía ni imaginármelo, pensar que estaríamos por delante de Barça y Madrid. Más por la forma que por otra cosa. Un equipo puede ir ganando y crecer con resultados, pero el cómo es lo que más me sorprende. Con nuestro presupuesto y con tantos grandes clubes, tener más puntos que ellos y, sobre todo, jugando bien a fútbol .... El resto de clubes nos dicen que hacemos muy bien las cosas y que hacemos un gran fútbol. Este es el gran éxito. Aun así, somos conscientes de nuestra realidad y no podemos poner la presión de estar arriba, porque no es nuestra liga.

¿Cómo definirías con una palabra el momento actual?

Hay tantas palabras que pueden marcar lo que vivimos... Para mí es un momento de plenitud. Hace años que tenemos la idea de conseguir resultados jugando bien a fútbol y creer en la gente joven. Todo esto está en un momento de plenitud y el tema será mantenerlo. Es el momento de máxima plenitud desde que llegué.

¿Con qué equipo lo equipararías en cuanto al juego? Míchel quiere tener un sello propio.

Hay clubes como el Villareal que han hecho pasos progresivos con una idea e identidad. Es lo que queremos hacer, pero puede pasar que vayamos muy deprisa. Tengo esta sensación de que todo va muy deprisa. Veo que no se puede pasar con tanta velocidad de una cosa a la otra. Si vamos tres años atrás, veníamos de luchar para subir a Primera, pero no teníamos esta identidad. Ahí miré de hacer un reset de idea, tipo de jugador y de entrenador. En dos años y dos meses, hemos volado y lo hemos cambiado. Es lo que siento y me ilusiona. Tengo esta sensación, no de miedo, pero sí de ver que vamos muy deprisa. No quiero llegar a ser víctima de lo que hacemos ahora. Quiero tener más control. Esto se ha descontrolado en cuanto al éxito.

¿Vértigo?

Sería la palabra, sí. Está siendo todo tan natural y normal... No veo jugadores ni cuerpo técnico sacando pecho. Más bien todo lo contrario. Están disfrutando del momento y abiertos a las alertas que vengan. Hemos sufrido tanto, que hace que lo disfrutamos mucho. Estamos en un punto muy real pero también más natural del que nos pensamos.

¿Qué parte de mérito o de culpa tiene Míchel de la situación actual?

Antes ya habíamos hecho cosas muy buenas con otros entrenadores. El club ya tenía un crecimiento importante en los últimos seis o siete años, sí, pero necesitábamos un líder que nos cambiara y nos llevara a la excelencia. La clave y, él lo dice, es Tenerife. Fue un día mágico que cambió la historia. Nos habíamos quedado a las puertas unas cuantas veces y quién sabe si esa sensación que todos teníamos, si él no hubiera estado, quizás no habríamos conseguido subir. Desde que llegó nos ha dado energía a todos. A mí, en el día a día en La Vinya, en los partidos... Todo el sufrimiento que acumulábamos lo hemos podido convertir en éxito gracias a él.

Míchel tiene contrato, pero si continúa así ¿teme que pueda venir algún grande y seducirlo?

Es que hablamos de que somos primeros y esto no tiene mucho sentido... Esto no pasa desapercibido. Tiene un talante muy normal y es reconocido en España y empieza a serlo en Europa. Es difícil no tener miedo de que pase eso. También tengo la sensación de que es una persona diferente, de valores, tranquila. Sabe que el club le ha dado mucho a él, es agradecido, comparte el éxito y sabe que tiene que dar pasos para mejorar todavía. Hace tiempo que se lo digo y hablamos, pero no hace falta porque lo siente. Esto es lo más importante. Tiene un talento especial y acabará haciendo cosas muy grandes. La primera será hacer grande al Girona y convertirlo en un club modelo. No hay mejor ambición en la vida que transformar en grande algo pequeño. Es el punto en el que está. Yo estoy cómodo, creando un producto de cosecha propia. Los grandes clubes ya han vivido muchos éxitos y tienen mucha historia; en cambio, sí que es bonito dejar arriba de todo a un club históricamente pequeño como el Girona y después irse.

¿Cómo el Leicester?

No estoy pensando en ganar Ligas. Veo muy lejos lo que hizo el Leicester. No estamos preparados para luchar contra Barça, Madrid o Atlético en el aspecto de estar por encima durante 38 jornadas. Otra cosa es que en la trigésima jornada estemos allí arriba; entonces diré que es momento de aprovecharlo. No digo que no tenga que llegar porque si a mí en verano me dicen que en la duodécima jornada la salvación ya estaría casi lograda, no lo habría ni pensado. Queda muchísimo y mantener tanto tiempo la excelencia es dificilísimo. Sí que tenemos que creer que somos en un modelo de éxito y que lo tenemos que conservar muchos años.

Aleix y Èric están en la prelista de España, Couto ha debutado con Brasil, los ucranianos siempre van, Blind ha vuelto... ¿Nota que son al escaparate y que el mundo se fija en el Girona?

Los jugadores han crecido internamente y han mejorado mucho el rendimiento a partir del modelo. Muchos han dado un paso adelante. El ejemplo más claro es Couto, que ha acabado siendo titular de la selección brasileña en tiempo récord. Esto es muy bonito. Èric ha vuelto, Aleix siempre ha estado, Yangel, Blind, los ucranianos son fijos gracias al rendimiento y al fútbol que hacen aquí.

¿Qué me dice de Savinho?

Aleix y Blind han dado un paso adelante, pero ya los conocía y eran muy buenos. El que me ha impactado más es Savinho. Es un jugador desconocido porque no tiene demasiados partidos profesionales a su espalda. Otra cosa es que tuviera el talento para pensar que podría llegar, pero con la velocidad que lo está haciendo, para mí era impensable. Hemos tenido muchas cesiones de jugadores del City, en situaciones parecidas en que sabíamos que necesitarían su tiempo. A muchos les ha costado, algunos han estado correctos, otros bien y él excelente. Lo que ha hecho en doce partidos hace que mucha gente del fútbol de élite piense que es un jugador top.

¿Se irá con la selección olímpica?

Está en la lista, pero sabemos que si va, también podría irse en enero o febrero. Queremos hablar porque sería una situación que nos afectaría mucho. Es un tema interno.

¿Estará otro año cedido aquí o el City lo reclamará?

Está en un proceso de crecimiento y la mejor manera de continuarlo es teniendo partidos en un lugar donde está cómodo. Siendo jugador del grupo esta idea está abierta por parte de todas las partes. Otra cosa es que continúe haciendo números desorbitados y el City se lo replantee. Hay que tener los pies en el suelo. La suerte es que es muy humilde y tiene un entorno muy bueno. Hoy en día, la idea es que continúe.

¿Cuánto dinero se han gastado en traspasos este verano?

Hemos ingresado más del que pensábamos. Las ventas de Bueno, Romeu y Terrats hicieron que pudiéramos invertir un poco más. Han sido fichajes estratégicos. Herrera han sido poco dinero, Iván Martín también poco por una situación con Terrats. Sí que hemos invertido con Dovbyk y Solís. Entre todo, estaríamos alrededor de los 14 millones en compras. En cuanto a las ventas, hemos ingresado entre 17 y 18.

Hablamos de Savinho, Dovbyk y compañía, pero por Montilivi también han pasado Doumbia y otros jugadores que no han salido tan bien. ¿Cómo se pasa de un extremo al otro?

No me gusta hablar de éxitos o fracasos porque todo depende de si la pelota entra. Si nos hubiéramos salvado en 2019, nadie habría hablado de nada. Fíjese que Solís es uno de los fichajes más caros que hemos hecho y nadie dice nada. Si estuviéramos mal, todo el mundo me pondría verde. La gente tiene que entender que con 24 o 25 jugadores, hay algunos que juegan siempre poco. Esto lo decide una persona, el entrenador. El tema es que el técnico los pueda hacer crecer y tenemos la suerte de tener Míchel, que hace más buenos a los futbolistas. Doumbia tenía el mejor Stuani delante. A todos los delanteros que han venido, les ha costado mucho. El único que se impuso fue Castellanos y quizás ahora Dovbyk. Lógicamente, también con el matiz del tema de edad porque Stuani es un jugador importantísimo pero desde un rol diferente. Ahora bien, sí que Doumbia vino en muy mal estado físico y estuvo dos meses en los que le costó mucho. Ese fichaje no salió bien, es la realidad. De fichajes que no han funcionado hay muchos cada año.

Llegó en 2014 y siempre ha destacado el apoyo que ha tenido de la propiedad. ¿De la afición también lo ha sentido?

Este club me lo he hecho mío porque lo he trabajado y me lo han dejado trabajar. Si esto cambia, lo diré enseguida, porque soy así. A partir de aquí, estamos en un mundo que ha cambiado con las redes sociales. Si las lees cuando se gana, es cuando más te engañas. Cuando pierdes y las miras como algo crítico que te intoxica, es cuando crees que tienes un problema. Hace cinco o seis años, sentí que, luchando cada año para subir, ascendiendo, estando en Primera, volver a luchar para subir y conseguirlo, era muy injusto que hubiera gente que me criticara tanto. Sinceramente, hubo un momento en que sentí que no tenía el apoyo de la afición. A la vez, me he dado cuenta de que se trataba de pequeños grupos, pocas personas y que el sentimiento real del 'gironisme' siempre ha estado en mí. Me he sentido muy admirado y respetado y, para mí, ha estado bien que mucha gente de Girona me haya hecho ver todo este sentimiento. Con el tiempo lo he visto y sentido. En las redes se habla más de lo malo que de lo que es bueno. Lo entiendo y lo respeto. No entraré en ninguna guerra. Tengo claro que el elogio debilita y la crítica ayuda a dar pasos.

¿David López y Arnau tienen que ser las siguientes renovaciones?

Arnau sale de abajo y nos ha dado mucho. Le queda un año y medio de contrato y la situación no es fácil. El año pasado algún club se interesó y es una situación que queremos resolver. Hay diferentes partes y se tiene que trabajar. Se merece este reconocimiento. David López hace dos temporadas que está a un nivel bestial y también se lo merece.

¿Está diseñando la plantilla del curso que viene?

Uno de los grandes trucos es anticiparse al mercado. No somos un club que se pueda gastar mucho dinero con el que luchar contra equipos grandes. No hay que tomar decisiones con prisas, pero sí estar alerta por si podemos mejorar el equipo en diciembre y dar otro paso el año que viene, intentarlo.

¿Se reforzarán en invierno?

Quedan dos meses todavía. Si son cosas que nos pueden hacer pensar que mejorarán el equipo o que nos irá bien en el futuro, tenemos que estar preparados para poderlo hacer. Eso sí, siempre que haya jugadores que quizás tendrán que salir porque no tienen los minutos que querrían.

¿Pablo Torre podría salir en enero?

Es joven, tiene talento y tiene que continuar trabajando. Está en un equipo que vive un gran momento. En el fútbol se tiene que tener paciencia y estar preparado. Es muy joven y tampoco suma tantos partidos profesionales. No es fácil. Todo lo que le rodea tiene que ser positivo porque si lo es él dará un paso adelante y nos aportará mucho de rendimiento.

¿Oriol Romeu tiene la puerta abierta?

Personalmente, a mí me gustaría cien por cien. Nos ha aportado cosas mágicas. Muchos jugadores me han dicho que él los ha enseñado a competir. ¿Si veo opciones? No es fácil porque hay contratos de por medio, pero no lo veo inviable.

¿A corto plazo o para el año que viene?

No lo veo inviable.

¿El caso Stuani está cerrado?

Él tiene todo el derecho a decir lo que quiera o dar el siguiente paso. Nosotros queríamos que se quedara, nunca hemos dicho lo contrario. Nos da infinidad de cosas. No podemos obviar que tiene una edad y le quedan dos años de un contrato que viene de hace muchos años. Si lo tenemos que revisar, lo revisaremos, siempre con el rendimiento que esperamos. Un poco es el punto donde estábamos como club. Entendemos que mantiene el buen rendimiento y se merece que nos replanteemos como quedará su situación estos dos años.

El primer equipo no trabajará en la Ciudad Deportiva en enero tal como se preveía, ¿verdad?

No dijimos nunca en enero. Me parece que podríamos ir entre abril y mayo. Otra cosa es cuando vayamos, se pueda ya trabajar perfectamente y no provisionalmente. Tenemos La Vinya todavía y si tenemos que esperar a hacerlo en julio en la pretemporada, nos lo replantearemos. Nos dijeron abril o mayo para hacer el cambio, pero ya veremos si acabamos en La Vinya. Es cuestión de resolver papeleo.

Hablando de papeleo, ¿el club tiene toda la documentación a punto por si tiene que jugar en Europa el curso que viene?

Hay muchos temas burocráticos y normativas. No soy la persona adecuada para decirlo. Yo me ocupo de estar preparado deportivamente y anticiparme por si pasa. Con temas de infraestructuras y papeleo hay gente en el club que trabaja y que quiere estar preparada al máximo. Es obvio que el club tiene que mejorar y es el siguiente paso, pero hay que recordar de dónde venimos y qué capacidad tiene Montilivi. Hay que hacer un estudio de mercado de qué se quiere hacer en el futuro y es en la situación que estamos.

Para que la gente esté tranquila, ¿el Girona podría jugar competición europea en Montilivi?

Como director deportivo estoy convencido que sí, pero no sé muy bien la normativa exacta.

¿Ha recibido algún mensaje especial de felicitación por el liderazgo?

Estamos en boca de mucha gente importante. Se nos reconoce que el trabajo no es fruto de la casualidad, sino de idea y picar piedra. Hablo de gente de élite como Pep Guardiola, que me puede enviar un mensaje diciéndome "habéis hecho más goles que nosotros". O de Txiki Begiristain, que nos dice que el que el trabajo es de "locos". Aquí te das cuenta de que es real todo y no un sueño. En lo único que pienso siempre es que seremos víctimas de esto. Que cuanto más arriba lleguemos, más fuerte será el batacazo. Si el año que viene hacemos 17 puntos en las 12 primeras jornadas, que está súper bien, la gente no lo entenderá. Ahí es donde tenemos que vigilar y ayudarnos. No habremos hecho nada mal, lo que pasa es que lo que estamos haciendo ahora es excepcional.

¿Usted es muy supersticioso. Tiene alguna manía que haga que todo funcione tan bien?

Este año, alguna vez me he dejado la cartera y he pensado ‘fastidiada, hoy palmamos’. Están cambiando las cosas. Lo que no he cambiado es dar una vuelta extra en la rotonda de antes de subir a la Creu de Palau. Siempre intento que no me vea nadie porque sé que hago el ridículo (ríe).