Dos generaciones de Barça

Melanie Serrano, la más veterana de la plantilla, reflexiona con las canteranas Laia Codina y Carla Armengol sobre la evolución del Barça en los últimos años

Melanie Serrano, la más veterana de la plantilla, reflexiona con las canteranas Laia Codina y Carla Armengol

Melanie Serrano, la más veterana de la plantilla, reflexiona con las canteranas Laia Codina y Carla Armengol / Valentí Enrich

Miki Soria

Miki Soria

Para que el Barça femenino, el actual subcampeón de Europa, sea hoy en día lo que es hay que remontarse muy atrás en el tiempo. Desde que las primeras pioneras vistieron la camiseta azulgrana en 1970 el club han cambiado muchas cosas, pero especialmente desde la llegada de Xavi Llorens al banquillo culé –base de los éxitos deportivos logrados hace unos años- y la posterior apuesta definitiva de la entidad por el fútbol femenino, profesionalizándolo y dotándolo de unos recursos que parecían utópicos no hace tanto, el crecimiento ha sido radical.

Una de las que mejor puede explicarlo es Melanie Serrano. A sus 29 años, la sevillana cumple su decimosexta temporada en el club y nadie como ella sabe lo que ha supuesto ese cambio. Por eso SPORT quiso juntar a la veterana lateral con dos de las más jóvenes del equipo: Laia Codina y Carla Armengol, que cumplen su primera temporada con el primer equipo tras su paso por la cantera culé y que viven una realidad muy diferente a la que tuvo Melanie en sus inicios.

LA VOZ DE LA EXPERIENCIA

Basta con decir que cuando Melanie debutó con el primer equipo del Barça, Carla tenía seis años y Laia, cuatro. Eran tiempos en los que Espanyol, Levante o Athletic dominaban en España y en los que en Europa no había ni rastro aún del Olympique de Lyon, sino que los equipos nórdicos y alemanes se repartían las primeras ediciones de la Champions League. “A nivel de número de entrenamientos no ha variado demasiado la cosa –se entrenaba tres veces por semana y no cuatro como ahora- pero sí en todo lo demás. Los horarios eran diferentes, no podías entrenar en un campo normal, con los vestuarios de ahora, no había gimnasio, los viajes no tenían nada que ver…”, les explica Melanie a las dos canteranas. “Antes todas estas mejoras se valoraban mucho. Ahora ellas ya lo pueden tener desde el principio y seguro que lo harán muy bien en el futuro como para que esto se mantenga así y siga creciendo”, expresó en voz alta la sevillana, convencida que el futuro será mejor para las que vienen por debajo.

Las diferencias se hacen notables viendo los referentes que tuvieron en sus inicios tanto Melanie –del fútbol masculino como Puyol- como Carla y Laia, que ya tenían futbolistas femeninas en quien fijarse como sus compañeras Mapi León o Caroline Hansen. Incluso en algo anecdótico como en una hipotética elección entre ganar 10 ligas seguidas o una Champions. Melanie prefiere los títulos domésticos, mientras que las dos canteranas quieren ganar la primera Champions de la historia del club. Eso sí, las tres coinciden que quieren hacerlo ganando al Olympique de Lyon en la final.