De tres... a ninguno: el Inter confirma el fracaso italiano en la Champions

En Italia todavía se lamentan. Reviven una y otra vez la ocasión desaprovechada por Thuram y la incomprensible ejecución de Lautaro desde los once metros. Porque en las botas de ambos estaba una eliminatoria que acabó sonriendo al Atlético de Madrid del Cholo Simeone.

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Suele pasar que, cuando parece que lo tienes todo de cara para llevar a cabo tu objetivo, acaba apareciendo algo, o alguien, que te despierta del sueño de una gran bofetada. Y el Inter vivió ayer una auténtica pesadilla en el Cívitas Metropolitano.

Dimarco adelantaba a los nerazzurri a la media hora de partido y ponía tierra de por medio en una eliminatoria que parecía decantarse de su lado. Sin embargo, quién sino Antoine Griezmann devolvería la esperanza rojiblanca con un tanto apenas dos minutos después. Y, a falta de apenas tres minutos para el 90, Memphis llevaba el partido a la prórroga con un gol que desataría la euforia en el Metropolitano.

El último billete a los cuartos de final se decidiría en una tanda de penaltis que contaría con un verdadero protagonista: Jan Oblak. Dos estiradas del guardameta esloveno, además del error de Lautaro, confirmarían el pase del Atlético a la siguiente fase en la competición continental.

UNA DECEPCIÓN ENORME

"Por supuesto que estamos decepcionados, estamos fuera de la Champions, después de una derrota muy dura. Pero tenemos un muy buen equipo, debemos mantener la cabeza en alto y seguir adelante", declaraba Yann Sommer, cabizbajo, una vez terminó el partido.

Lamentaba que el equipo tuvo varias ocasiones claras para perforar la portería de Oblak, pero no las aprovecharon. "Ambos equipos tuvieron ocasiones, los pequeños detalles marcaron la diferencia", explicaba.

"Hay decepción porque venimos de jugar una final el año pasado. Es normal que haya decepción, pero los jugadores tienen que sentirse orgullosos", declaraba Inzaghi tras el partido.

DEL TODO... A NADA

El cuadro de Simone Inzaghi era la última esperanza italiana en la Champions. Y su eliminación confirma el peor momento del fútbol italiano en la máxima competición europea. Sin ir más lejos, hace un año, Italia tenía tres equipos entre los ocho mejores equipos de Europa (Inter, Milan y Nápoles) y, ahora, cero.

En Italia andan sorprendidos. No se pueden creer que el vigente subcampeón de la competición y el actual líder de la Serie A, que le lleva dieciseis puntos al segundo, el Milan, y que tiene medio título en sus manos, haya caído ante un Atlético de Madrid cuyo nivel, a su parecer, es claramente inferior al de otras temporadas.

Y encuentran extraño que un equipo casi imbatible esta temporada, tan solo sumaban una derrota en la Serie A, dejaran que el conjunto del Cholo Simeone, que jugó un buen partido, le diera la vuelta a la eliminatoria.

Ahora, sin embargo, queda depositar la confianza en los equipos que siguen vivos en las otras dos competiciones europeas. Milan, Roma y Atalanta se juegan su pase a los cuartos de final de la Europa League, y a excepción del conjunto de Bérgamo, que empató a uno en la ida con el Sporting de Portugal, 'giallorossi' y 'rossoneri' tienen bastante encaminadas sus eliminatorias.

Mientras que la Fiorentina está por delante en la eliminatoria ante el Maccabi Haifa (4-3) en la Conference League.

PREOCUPACIÓN POR EL RANKING UEFA

De momento, Italia (16.571 puntos) sigue en lo más alto del ranking UEFA estacional, pero la distancia que le llevaba a Alemania (15.928 puntos) y España (15.000 puntos) se ha reducido, porque dos y tres equipos, respectivamente, han cerrado su clasificación a los cuartos de final de la competición.

El objetivo es claro: los dos primeros países tendrán una plaza extra en la próxima edición de la Champions. Y Italia debe confiar en Milan, Roma, Atalanta y Fiorentina.