El Bayern somete a un Schalke contestón

Robben y Müller se abrazan tras el segundo gol, obra del alemán.

Robben y Müller se abrazan tras el segundo gol, obra del alemán. / AFP

C. F. Sainz

Novena victoria consecutiva del Bayern Múnich en la Bundesliga (2-1). El cuadro bávaro, a pesar de anotar sus dianas en la primera mitad, sufrió en el primer capítulo, mientras que tras el paso por vestuarios ganó en posesión y controló el duelo después de unos primeros minutos en los que su rival avisó en un par de ocasiones.

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Bundesliga

2
1
Alineaciones
Bayern Múnich
Ulreich; Kimmich, Boateng (Súle, 71'), Hummels, Alaba; Vidal; Robben, Müller, James Rodríguez (Javi Martínez, 81'); Ribery (Coman, 77'); Lewandowski.
Schalke
Fahrmann; Stambnouli, Naldo, Kehrer; Schoepf, Goretzka, Meyer (Oczikpa, 59'), Caliguri; Embolo, Burgstaller (Harit, 65'), Di Santo (Konoplyanka, 77').

El conjunto muniqués, que tan solo ha caído en dos de los 22 encuentros disputados en la competición regular –frente a Hoffenheim y Borussia M’gladbach-, sufrió a su incorporación de cara a la próxima campaña, Leon Goretzka, aunque los de Gelsenkirchen se vieron superados por el gran poder ofensivo local a pesar del buen hacer de su vistoso futbolista.

Sin Jupp Heynckes, que no pudo sentarse en el banquillo debido a una inoportuna gripe, la cabeza visible de los locales fue su segundo entrenador, Peter Hermann.

A pesar de que fue el Schalke el primero en avisar con un disparo de Embolo en el primer minuto de juego que Ulreich rechazó con una buena estirada, Lewandowski abrió el marcador en el 6’. Un potente disparo desde la frontal de Müller fue rechazado por Färhmann y el polaco, muy atento, solo tuvo que cazar el rechace para poner por delante a los suyos. Fue el undécimo consecutivo de Lewandowski en el Allianz Arena en partido de Bundesliga, cifra que años antes había logrado precisamente su entrenador, Heynckes.

Pudo igualar Kehrer dos minutos más tarde, pero su cabezazo a boca de gol se marchó por la línea de fondo. Más acertado estuvo Di Santo antes de la media hora de juego, que empató el duelo con total merecimiento con un disparo cruzado.

Estaba plantando cara el Schalke a un Bayern que sumaba 11 encuentros oficiales sin caer derrotado, pero la pegada local hizo que los de Gelsenkirchen se fueran al descanso por debajo en el marcador. Un pase en la zona derecha del área de Robben lo aprovechó Müller para, con un centro chut raso, superar por bajo a un Färhmann que para nada se esperaba un recurso que sorprendió a todos, incluso al propio autor.

No bajó de revoluciones el duelo en la segunda mitad y a los cinco minutos de la reanudación, el Schalke pidió penalti por una caída de Burgstaller en el interior del área, aunque el colegiado amonestó al atacante visitante al considerar que se había dejado caer ante Ulreich. Comandado por el primer fichaje del Bayern de cara al próximo curso, Leon Goretzka, los pupilos de Domenico Tedesco estaban plantando cara al todopoderoso líder de la Bundesliga.

Tras un periodo de juego de idas y venidas de ambos conjuntos sin ocasiones claras, Embolo puso de nuevo a prueba a Ulreich, pero el portero local sacó una mano salvadora al latigazo desde la frontal del internacional suizo. Poco a poco los locales se fueron haciendo con el cuero hasta hacer desaparecer del verde a un Schalke que había plantado cara durante todo el encuentro.

El Bayern se dedicó a dormir el duelo en los últimos 20 minutos y las ocasiones desaparecieron, a excepción de un disparo de Alaba en el tramo final que Färhman despejó a la esquina. Los bávaros volvieron a mostrar su superioridad en Bundesliga ante un rival que les exigió más de la cuenta. Buena prueba de cara a los octavos de final de Champions que disputan en dos semanas ante el Besiktas, primero en Alemania.