Picassos en la casa del pobre

¿De verdad que cuatro cracks como Haaland, Lewandowski, Salah o Mbappé forman parte de la mesa de negociación de los fichajes azulgrana?

Quizás fuera necesario hacer una previa para recordar que el FC Barcelona es un club que empezó la temporada en quiebra técnica

"¿Haaland? Siempre hay que pensar lo contrario a lo que diga el presidente"

"¿Haaland? Siempre hay que pensar lo contrario a lo que diga el presidente" / RONDEANDO

Xavi Torres

Xavi Torres

Tras el 0-4 en el Santiago Bernabéu, el Barcelona vive en paz. Parece que la resurrección deportiva es un hecho y que, como consecuencia, el club se acerca a su mejor versión. Erling Haaland es un objetivo y, si decide no venir, suenan Robert Lewandowski y Mohamed Salah. Incluso, en las últimas horas, ha aparecido el nombre de Kylian Mbappé. ¿De verdad estos cuatro cracks forman parte de las mesas de negociación de los fichajes azulgrana?

Club en negativo

Quizás fuera necesario hacer una previa para recordar que el F. C. Barcelona es un club que empezó la temporada en quiebra técnica. Tras la gestión del presidente Josep Maria Bartomeu, el último CEO azulgrana, Ferran Reverter, explicó que el club tenía un agujero de 1.350 millones de euros y que si fuera una sociedad anónima deportiva estaría obligada a la disolución.

La pandemia, el incremento de los gastos en la gestión y el aumento desenfrenado e irracional de la masa salarial han llevado al Barcelona a este caos crítico. Si nos quedamos en este último punto, encontraremos cifras muy preocupantes ya que, por ejemplo, en las últimas cinco temporadas la masa salarial siempre ha superado el 60% del presupuesto y en tres de ellas, incluso el 70%, porcentajes ambos que colocarían a cualquier empresa en una posición precaria.

El dichoso límite salarial

Ya saben que el límite de coste de plantilla deportiva es el concepto que recoge la cantidad máxima que cada equipo puede gastarse en salarios destinados a jugadores, entrenador, segundo entrenador y preparador físico. Es el principal pilar dentro del control económico para que los clubes sean solventes y que ejecutan los especialistas de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) con fórmulas matemáticas sin ninguna subjetividad individual.

En caso de tener un límite salarial que no garantice la viabilidad del club la LFP lo reduce hasta una cantidad que sí la haga posible. Ya saben que en el caso del Barça, con el límite salarial excedido, el club vive sancionado y, por tanto, o deja ir lastre o reduce el patrimonio neto negativo, fijado por el club en más de 450 millones de euros.

“Las pérdidas del Barcelona son mayores que la capacidad que tiene de obtener recursos”, dijo este mes Javier Gómez, Director General de la LFP, después de anunciar que el club catalán era el único de Primera y Segunda con el límite salarial negativo, es decir, -144'353 millones de euros. Surrealista.

Agüero y el mercado de invierno

Hay que recordar, también, que el Kun Agüero fue inscrito sobre la campana en el cierre del mercado de verano y que tres de los cuatro fichajes de la segunda ventana, la de invierno, son especiales: Alves, por su sueldo, apenas tiene impacto; Adama ha llegado cedido con una mini-ficha, y el Arsenal aceptó sacarse de encima a Aubameyang pagando el 50% de su ficha esta temporada y el 40% de la que viene.

Solo Ferran Torres ha llegado al Camp Nou gracias a un gran traspaso -55 millones de euros, más 7 en variables- pero con un salario ajustado a los nuevos tiempos.

Porque éste es el problema. Que Messi fuera el mejor jugador del mundo y cobrara como tal no prostituye la idea ni la economía del club. Sin embargo, la inconciencia de Bartomeu con el resto de la plantilla produce, como mínimo, sonrojo. Para entendernos y a modo de ejemplo, imaginemos que hablamos de un defensa azulgrana.

En una supuesta lista de los mejores jugadores en esa demarcación, ¿en qué posición del ránquing estaría? ¿El cuarto? Pues está claro que no debería cobrar más que los tres primeros. Este protocolo, sencillo de entender, en el Barça no se ha llevado a cabo de manera que los futbolistas azulgrana han sido mejor tratados que sus colegas de clubs como el Bayern, Juventus, Liverpool, Manchester City e incluso, salvando a Messi y Neymar, del PSG.

¿Entienden ustedes por qué se hace tan complicada la salida de algunos jugadores con contrato? Efectivamente, todos aquellos clubes que puedan estar interesados por jugadores del Barça no pueden asumir sus salarios.

Y una cosa más: tal y como el presidente Bartomeu organizó los contratos, los futbolistas del Barcelona van a cobrar la temporada que viene todavía más dinero que en la actual. Solo después de la temporada 2022-23, cuando finalicen sus contratos Araujo, Coutinho, Gavi, Memphis, Mingueza, Neto, Riqui, Sergio, Tenas y Wagué -a la espera de algunas renovaciones pendientes-, todo se va a relajar un poco.

Nueva filosofía en los contratos

Por todas estas razones, el Barcelona tiene problemas para traer jugadores al Camp Nou. La Junta de Joan Laporta no ha tenido otro remedio que apostar por la estabilidad del club a base de ajustar los salarios en una nueva fórmula que lleve al Barça, de nuevo, a pisar con los pies en el suelo. Este paso, sin embargo, está provocando graves tensiones en las negociaciones entre el club y los futbolistas ya que las comparaciones, esta vez, sí son odiosas. ¡Y mucho!

¿Cómo puede ser que Umtiti cobre más, por ejemplo, que Aubameyang? ¿O que a Araujo se le presenten unas condiciones tan alejadas para su renovación a las de descartes como Coutinho, Pjanic o Trincao que, recordémoslo, en verano deben regresar al club tras las cesiones de esta temporada? Es evidente que es injusto pero no hay otra salida que regresar a la senda del sentido común.

Para Mateu Alemany el pasado es historia. Él es quien debe ajustar las condiciones en función de la edad y el rendimiento de los jugadores que deben renovar y de la edad, las expectativas de rendimiento y las características de la situación del futbolista, para los fichajes. Sin embargo, nada es sencillo. Por ejemplo, ¿por qué Kessié puede llegar del Milan con un salario más elevado que el que se le está ofreciendo a Gavi -solo 17 años pero ya internacional absoluto- para renovar? Fijar criterios justos no parece sencillo.

Los fichajes

Sea como sea, el club está trabajando en la incorporación de jugadores que terminan sus contratos -César Azpilicueta (32 años, Chelsea), Andreas Christensen (25, Chelsea), Franck Kessié (25, Milan), Noussair Mazraoui (24, Ajax)-, cedidos -Iñaki Peña (23, Galatasaray)- o buscando intercambios -Adama (26, Wolverhampton) por Trincao. Todos ellos, además, deben estar de acuerdo en aceptar las nuevas condiciones económicas del Barcelona, con todos los agravios comparativos correspondientes.

Visto lo visto, ¿puede el Barça más pobre pensar en los cracks mundiales del momento? Kylian Mbappé (23, PSG) aparte –porque lo tiene hecho con el Real Madrid-, Erling Haaland (23, Borussia Dortmund), Robert Lewandowski (33, Bayern) y Mohamed Salah (29, Liverpool) tienen contrato en vigor y, por tanto, el club debería pagar un traspaso para hacerse con sus servicios. Ningún problema.

Una vez más, el drama sería que la LFP aceptara sus salarios. Hoy por hoy, misión imposible. ¿Mañana? Parece que también. Por ejemplo, para que Haaland cupiera con un sueldo de 20 millones de euros el Barcelona debería sacarse de encima futbolistas con salarios de hasta 80 millones.

Y con Lewandowski y Salah, por sus supuestos salarios, deberían liberarse unos 60 millones para cada uno de ellos. ¿Saben ustedes cuántos futbolistas deberían salir? Depende de lo que cobren, pero para cada uno de ellos... ¡seis, siete, ocho o quizás más! ¿Y Raphinha (25 años, Leeds) y todos los otros nombres que suenan? Pues calculen ustedes.

¿Les parece que la situación es realista? ¿Puede una persona pobre tener cuadros de Picasso colgados de las paredes de su comedor? Veremos. No hay duda de que habrá movimientos y de que el Barcelona se va a reforzar aunque quizás las expectativas no deberían apuntar tan alto.

Tal vez sea más realista creer en la reconstrucción de un equipo con un perfil de futbolistas más terrestres capaces, como está sucediendo ahora, de conformar un equipo en mayúsculas. Quizás los objetivos apunten más a la defensa. ¿O creen, de verdad, en el milagro? Ya saben ustedes que en el mundo del fútbol, a veces, se dan...