Mourinho mantiene un sentimiento de venganza hacia el Barça

Mourinho se ha sincerado en 'Sport&Style'

Mourinho se ha sincerado en 'Sport&Style' / SPORT&STYLE

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Jose Mourinho, actual entrenador del Manchester United, no olvida los intensos y polémicos clásicos Real Madrid - FC Barcelona. No poder superar a Pep Guardiola y a Tito Vilanova le ha quedado como un resquemor que parece que es difícil de olvidar. Al menos, eso es lo que se desprende de una entrevista que José Mourinho ha concedido a la revista 'Sport&Style' del diario francés 'L'Equipe', del cual se ha avanzado algunos estractos.

Jose Mourinho asegura que su sueño sería poder entrenar ahora a los equipos que ha dejado, ya que serían equipos a los que "ha entrenado Mourinho".

El Real Madrid

"Me hubiera gustado llegar al Real Madrid en el momento en que lo dejé. Me gustaría aterrizar en el Manchester United justo cuando decida irme. ¿Para qué? Para coger a un equipo entrenador por Mourinho... ¡Un sueño!".

"Cuando me fui, el Madrid estaba preparado para explotar. Desde entonces fue cuando realmente empezó a ganar, especialmente contra el Barcelona. (...). Soy un constructor, un albañil del fútbol".

Entrenador

"¿Si he nacido para entrenar? Sí, eso creo. También creo que hay docenas de formas de desarrollar el talento. Algunos, como los exjugadores, han logrado llevar su experiencia al nivel más alto del campo al banquillo. Otros, como yo, no eran muy buenos jugadores. Tuvimos que estudiar Ciencias del deporte en la universidad, descifrar gradualmente la filosofía del juego, pero, al final, no estábamos en igualdad en la línea de salida. Sinceramente, creo que tuve un pequeño avance innato. Su primera pregunta era sobre mi metodología. ¿Tengo una? Evidentemente que aplico un método específico de gestión cuando entreno. Además, mi método es copiado actualmente por muchos colegas".

El trabajo

"¡Trabajo como un loco!. Creo que, para tener éxito en un un trabajo como el mío hoy en día, primero tienes que controlarlo todo y luego, intervenir en múltiples niveles de experiencia. Si un joven quiere ser entrenador e imagina que sólo trabajará dos horas diarias en un buen campo de hierba, se tapa el ojo con el dedo. (...). La prioridad siempre es la misma: desarrollar el club en el que trabajas... a menos que tengas la suerte de entrenar a un equipo que ya está construido para la victoria. Ese es el plan perfecto. Entonces, el plan no existe. Honestamente, me encantaría dirigir a un equipo que hubiera sido entrenador por mí mismo en los cinco años anteriores”.