Mascherano: "Venir al Barça me ha cambiado en todos los sentidos"

Poco se imaginaba Javier Mascherano que un día cumpliría 200 partidos con el FC Barcelona en aquel verano de 2010 en el que, inicialmente, negociaba su salida del Liverpool para reencontrarse con Rafa Benítez en el Inter de Milán.

"Fue un verano muy largo porque hubo Mundial de por medio y recuerdo que Rafa empezó a llamarme y, la verdad, me hacía gracia volver a trabajar con él, así que empecé a negociar con el Liverpool y también a entrenar, aunque con la cabeza más fuera que dentro", relata en una entrevista oficial el argentino. 

El Inter era su objetivo... hasta que apareció el Barça. "En medio de todo apareció el Barça y mi cabeza empezó a imaginarse cosas, tanto que me decanté por el Barça por venir a uno de los mejores equipos del mundo y en un momento como aquel en el que estaba en su esplendor", continúa un Javier Mascherano que reconoce que "viví todo aquello con mucha ansiedad y nerviosismo. No fue fácil porque hubo que luchar mucho, pero siempre con la convicción de que quería venir".

El reconvertido central azulgrana jura que nunca se imaginó alcanzando la cifra de 200 partidos por la "competencia tanto interna como externa que hay. Todo el tiempo estás pasando pruebas, pero todo es fruto del trabajo", algo que siempre ha acompañado a la carrera del argentino ya que "no gozo del talento innato de otros jugadores que pueden marcar la diferencia".

WEMBLEY, LA CULMINACIÓN DE UN SUEÑO

Si el 'Jefecito' tuviera que quedarse con uno de los "muchos momentos felices" vividos en el FC Barcelona, el argentino tiene claro que ese sería el de la final de Champions en Wembley. "No esperaba jugar sinceramente, ya lo tenía en la cabeza y me sorprendió mucho cuando Pep dio la alineación y me encontré en ella. Ganarla supuso alcanzar un sueño que se me había negado unos años antes con el Liverpool", relata un Mascherano que destaca, también, su reconversión a central.

"Venir aquí me ha cambiado en todos los sentidos. Ni siquiera sabía si podía hacerlo o no (jugar de central) porque siempre me había visto como medio defensivo", se sincera un jugador que ya siente que "esta es tu casa".