¿Y por qué no lo de Lucas al Barça?

Sergi Capdevila

Sergi Capdevila

Más allá de la llegada del ‘parche’ (porque no tiene otro nombre) del colombiano Jeison Murillo, eso no quita que el Barça tenga encima de la mesa un problema a medio plazo en la línea defensiva. Ante la más que segura marcha de un Vermaelen que vuelve a estar lesionado y que no se le puede considerar como un ‘activo’ para los esquemas de Valverde y con la situación llena de interrogantes que nos deja Samuel Umtiti, se vuelve a abrir una abanico de posibilidades de cara a un centro de la zaga que está trayendo demasiados dolores de cabeza desde hace mucho tiempo.

El fichaje de Lenglet se está destapando como un acierto (¿Se imaginan cómo estaríamos si no se hubiera pagado su cláusula?, sí, pero es que continúa existiendo un vacío. Un vacío que hay que llenar. ¿Y por qué no puede ser una alternativa Lucas Hernández?

Los últimos días se ha producido un pequeño terremoto en las dependicas del Wanda Metropolitano. La noticia que sacó el Diario As sobre un posible acuerdo entre Lucas y el Bayern por el que la entidad bávara pagaría la cláusula de rescisión del jugador bajo su consentimiento desató un sismo en el seno de la entidad rojiblanca. Rápidamente el club intentó desmentir la información y se intentó que el propio jugador saliera al paso de los rumores, pero lejos de hacerlo, Lucas ha mantenido el silencio.

Nada descabellado

La preocupación es máxima e incluso un hipotético acercamiento de los capitanes para transmitirle su importancia en el proyecto habría sido contestado con bastante frialdad. El sentimiento general es que el futbolista se puede marchar. Sabe que ahora mismo es uno de los defensas más codiciados del panorama internacional. Titular en la consecución del Mundial con su selección, Francia (recordemos que su hermano Theo eligió jugar con España), el mayor de los Hernández puede actuar con la misma solidez y buen rendimiento en el lateral izquierdo y la posición de central zurdo. Es rápido, potente en la anticipación, va bien por arriba y, repetimos, los 80 ‘kilos’ de su cláusula son un escaparate apetecible para muchos.

Su fichaje por el Barça no sería para nada descabellado. El club azulgrana necesita reforzar la parcela defensiva, sobre todo ante esas dudas de las que hablamos que está dejando la situación de Umtiti y su negativa a operarse. Con la llegada de Lucas se matarían dos pájaros de un tiro. Habría un suplente de lujo para dar alternativa a Jordi Alba y el club se nutriría con uno de los centrales de mayor proyección de Europa (22 añitos). Evidentemente eso no significaría que quedara cerrada la defensa porque otro central diestro sería más que necesario para doblar a un Gerard Piqué al que no se puede ahogar. A la vista está que el jugador no se cierra en banda a una salida y a pesar de que el Bayern parece que está cerca y lo tiene atado en corto aquí no hay nada cerrado y 2019 es largo…