La afición del Barça: "Mucho Betis"

El amarillo, color prohibido

Sorprendió (o no) que, en los accesos al Metropolitano habilitados para que la afición del Barça entrara al estadio, la Policía Nacional se dedicara a registrar a los seguidores en busca de camisetas, bufandas y prendas amarillas. El objetivo no eran objetos susceptibles de poder ser lanzados desde la grada o potencialmente peligrosos, sino piezas de ropa amarillas. En cambio, no fueron tan meticulosos, al contrario que en otras ocasiones, con las ‘estelades’. Muchas camisetas y bufandas acabaron en contenedores habilitados que acabaron repletos de amarillo. Surrealista.

Piqué, Umtiti y los córners

Fue una imagen curiosa durante la primera mitad. En uno de los córners que lanzó el Barça, Piqué hablaba con Umtiti gesticulando de forma ostensible. Parecían tener sus más y sus menos, con Gerard liderando la charla. Lo más probable es que estuvieran hablando sobre una jugada anterior, puesto que ambos subieron a rematar el córner y fue Sergi Roberto quien se quedó como último hombre.

Pitos a Iniesta

Cuando Andrés Iniesta fue sustituido, se llevó una ovación de época desde la grada del Metropolitano. La inmensa mayoría de las dos aficiones aplaudieron al blaugrana tras su partidazo coronado con gol. Sin embargo, siempre existen notas discordantes y la ovación no fue unánime. Fueron varios los seguidores hispalenses que, desde su posición, silbaron a Iniesta. Seguramente disgustados por cómo se desarrolló la final, pero pagándolo con alguien que siempre ha hecho gala de su deportividad.

la afición culé: "mucho betis"

Los seguidores del Barça, en el fragor de la batalla del Metropolitano, con una final en juego, se acordaron de la gran rivalidad que mantiene el conjunto hispalense con su rival ciudadano, el Betis. Es por esa razón que, durante el encuentro y en más de una ocasión, la grada blaugrana empezó a cantar "mucho Betis, mucho Betis". Desde el otro lado la afición sevillista respondía con pitos. 

Valverde no quiso protagonismo

Nada más señalar Gil Manzano el final del encuentro, los futbolistas empezaron a celebrar sobre el terreno de juego el título acabado de conquistar. Ernesto Valverde, en ese momento, intentó tomar algo de distancia. No se sabe exactamente si por la voluntad de dar mayor protagonista a sus jugadores o porque necesitaba desconectar después de una semana algo complicada con la eliminación de la Champions y, sobre todo, por la información interesada publicada por un medio de comunicación que apuntaba a su posible destitución si no ganaba.

Cumpleaños feliz para Cillessen

Jasper Cillessen ha sido el tapado del torneo. Su actuación ante el Sevilla en la final fue soberbia, pero no menos que durante toda la Copa. El meta holandés, a la sombra de Ter Stegen, ha sabido ser paciente y esperar su momento. El pase ‘a lo Koeman’ que le puso a Coutinho en el primer gol de Suárez fue impresionante. La mejor manera de celebrar su 29 aniversario, que empezó a cumplir pasadas las doce de la noche sobre el césped. ¡Felicidades!

banderas 'infiltradas'

Durante toda la previa de la final se vieron más banderas españolas, algunas de ellas con el escudo del Barça, entre la afición blaugrana que 'estelades'. Fue así en la Fan Zone, donde eran mayoría las rojigualdas. No fue así en el Wanda Metropolitano, cuando las 'estelades' fueron la inmensa mayoría de las banderas que se mostraron, además de las del Barça, claro. Pero también hubo muchas enseñas españolas entre la afición del Barça, como si alguien se hubiera encargado  de ello. Y, obviamente, no pasó nada de nada porque ambas banderas e ideas políticas pueden convivir perfectamente.

Una final internacional

La presencia de medios de comunicación internacionales en la tribuna de prensa demostraba que la final de Copa ante el Sevilla, la última con Andrés Iniesta en el Barça, tenía un interés mediático que iba más allá del estado español. Había periodistas argentinos, franceses, alemanes, colombianos, brasileños… El mundo vivió de cerca la exhibición blaugrana, con el capitán y Messi liderando a un Barça colosal.