El Barça cede el liderato tras un espeso partido ante el Milan

El Milan se impuso por 75-70 al Barça en un extraño partido de ambos conjuntos, muy espesos en ataque, y con el liderato en juego. El cuadro de Ettore Messina, que dominó gran parte del duelo en el que los azulgranas siempre fueron a remolque, consigue ponerse en cabeza en solitario de la Euroliga con siete triunfos y una derrota y los de Jasikevicius suman su segunda derrota consecutiva en Europa.

El FC Barcelona inició el partido por detrás ante un Olimpia Milan con un alto porcentaje anotador y que siempre encontró la fórmula para superar la defensa azulgrana.

El mayor porcentaje en el rebote benefició mucho al conjunto local que con un Shields dominante encontró la canasta fácil y la eficacia sobre todo en el lanzamiento exterior gracias al cual se marcharon al final del primer cuarto con una ventaja de siete puntos (28-21).

Saras Jasikevicius empezó a mosquearse en la banda al ver que el quinteto con el que salió de inicio (Calathes, Higgins, Mirotic, Sanli y Hayes-Davies) no conseguía detener la sangría del cuadro milanés y dio entrada a Kayle Kuric que dio algo de frescura al juego del Barça. Fue un cuarto con mucho ritmo y muchas canastas, pero en el que los azulgranas no acababan de encontrarse cómodos en la pista.

Segundo cuarto de desaciertos

Cambió totalmente el panorama en el segundo cuarto donde el desacierto se instaló en una pista con una grada llena que no entendía como podía ser que el equipo de Ettore Messina estuviera exactamente seis minutos sin anotar. Con un parcial de 0-6, el Barça recortó distancias (30-27) y con la entrada de Pierre Oriola el Barça mejoró notablemente en defensa, sin embargo el equipo de Jasikevicius se despistó de nuevo y ante un equipo como el Milan, muy físico, las desconexiones se pagan caras y volvió el +10 para los italianos en el marcador (40-30). Se llegó al descanso con un preocupante 42-34 y muchas dudas para un Barça obligado a elevar la velocidad en la circulación de balón y en las transiciones para contrarrestar el juego del rival. Los hombres más determinantes del equipo como Mirotic, Calathes o Davies debían dar un paso al frente para sacar al Barça del atolladero en el que se metió en la primera mitad.

Tras el salto de inicio y otro triple de Hall, un dolor de cabeza para el Barça, parecía que la conexión Calathes - Mirotic empezaba a carburar con dos canastas en este sentido (45-39), pero nada más lejos de la realidad. Demasiadas pérdidas de balón, cuatro tiros libres fallados y poca puntería en el tiro condenaban una y otra vez al Barça a distancias de vértigo que se veían incapaces de remontar.

Con Sergio Rodríguez dominando a placer el partido y dirigiendo a los suyos con maestría, el Milan consiguió cerrar el tercer cuarto con un +12, máxima diferencia del partido (61-49).

Casi se consigue en el último cuarto

Increíble el arranque del FC Barcelona en el último cuarto gracias a un Brandon Davies espectacular y con un parcial de 0-12 los de Jasikevicius se pusieron a solo dos puntos del Milan y obligaron a Messina a parar el partido al ver la empanada de sus hombres. Pero el Barça estaba decidido a llevarse el duelo y Davies bailó a la defensa del Milan para empatar el duelo a falta de seis minutos para el final.

Fue Hayes-Davis el encargado de consumar la remontada momentánea en la siguiente jugada. El Milan colapsó y no conseguía ver canasta gracias, en gran parte, a la mejora en defensa del Barça (61-63).

Pero el Milan despertó de nuevo y desbarató todo el trabajo realizado por el Barça para conseguir ponerse por delante y acabar consiguiendo el triunfo y con él, el liderato en solitario de la Euroliga.