Atletismo - Mundial 2015

Renaud Lavillenie fracasó en el Mundial de Pekín y un 'niño' de 21 años ganó el salto con pértiga

Sorpresa y de las gordas en el Mundial de Pekín. Lavillenie fracasó en su intento de ganar la única medalla que falta en su palmarés. La victoria fue para el canadiense Shawnacy Barber, un teenager

Un joven canadiene, en la cima de la pértiga mundial

Un joven canadiene, en la cima de la pértiga mundial / AFP

Carlos R. Galindo

Shawnacy Barber, de 21 años, se convirtió en el gran protagonista de la final de salto con pértiga del Mundial de Pekín para desesperación del gran favorito, el francés Renaud Lavillenie, que seguirá sin conseguir el único título que falta en su palmarés.

Barber se llevó la medalla de oro tras franquear el listón situado sobre 5,90 metros en su primer intento, mientras que el alemán Raphael Holzdeppe, segundo, lo logró en su tercera tentativa. Un ensimismado Lavillenie y el polaco Piotr Pawel Wojciechowski registraron 5,80 en el primer salto, por lo que compartieron el  bronce. El talentoso canadiense y Holzdeppe atacaron ya sin suerte los 6,00 metros.

El plusmarquista mundial de la especialidad, Renaud Lavillenie, comenzó el concurso de forma impresionante, tras superar los 5,70m, con un margen de unos treinta centímetros. Pero el campeón olímpico de 2012 se atascó en 5,90 m, y quedó fuera de concurso. De esta forma, el francés, cuenta  con tres medallas de bronce (2009, 2011 y 2015) y una medalla de plata (2013). El título Mundial al aire libre es el único trofeo que falta en su lista.

Un año después de ser madre por primera vez, la keniana Vivian Cheruiyot, campeona mundial en 2011 (y dos veces de 5.000), conquistó su segundo título de 10.000 metros en un mano a mano con la etíope Gelete Burka, con quien sostuvo un cerrado esprint en la última recta.

Una marca de 31:41.31 dio el triunfo a Cheruiyot, seguida, a 46 centésimas, por Burka. A continuación llegaron dos estadounidenses, la joven promesa Emily Infeld (31:43.49), que metió su pecho cuando Molly Huddle ya daba por descontado que se colgaría el bronce. Se quedó con un par de narices. La alegría de Infeld fue indescriptible.

El keniano Ezequel Kemboi retuvo el título mundial de 3000  obstáculos -su cuarto consecutivo, 2009-2011-2013-  en una carrera mágica para los intereses de ese país. Los cuatro primeros atletas clasificados tenían esa misma nacionalidad.

Kemboi (33), también doble campeón olímpico (2004/2012), acreditó un tiempo de 8:11.28, y llegó por delante de su joven compatriota, Conseslus Kipruto (8:12.38), y de Brimin Kiprop Kipruto (8:12,54). El estadounidense Evan Jager, que era uno de los granes favoritos, quedó, terminó fuera del podio (8:12,62). Simplemente, no resisitió el ritmo de los africanos.

La colombiana Caterine Ibarguen retuvo su título de triple salto y sumó su victoria número 29. A sus 31 años, se fue 14,90 m. y derrotó a la israelí de origen ucraniano, Hanna Minenko (14,78 m) y a la campeona olímpica Olga Rypakova (14,77 m), de kazajistán. .