Fede Valverde, un aprendiz de Michael Laudrup bajo la batuta de Ancelotti

·      El entrenador italiano ha vuelto a reconvertir al uruguayo, que ha pasado de extremo con llegada, a futbolista más trabajador… pero gran asistente.

 

·      Con siete pases de gol, ya es (empatado con Kroos) el merengue que más asistencias ha dado esta temporada en Liga. Son las mismas que el curso pasado.

 

·      Su entrenador sólo le pide ser “un poco más arrogante” para así desarrollar algo más de “carácter” unida a su “humildad” en la nueva posición de medio centro. 

Valverde, en la jugada del 1-2

Valverde, en la jugada del 1-2 / AP

Betfair

Betfair

Fede Valverde ya no es un pajarito. Hace tiempo que el uruguayo del Real Madrid dejó atrás el que era su calificativo de chaval (se lo llamaban por ser algo patilargo, enclenque) para derivar en un halcón, cargado de potencia física, músculo y fuerza. Una versión que explotó especialmente la temporada pasada con sus remates lejanos (le dieron 12 goles), pero que ha frenado este curso para, de nuevo, evolucionar en algo diferente. Mejorado. Una suerte de aprendiz de Michael Laudrup bajo la batuta de Carlo Ancelotti.

Porque Valverde ya no pisa tanto área como lo hacía antaño, pero sí que se ha esforzado en asistir más de lo habitual, un rol por el que fue especialmente reconocido el danés en los 90. Pensar en un asistente de lujo es pensar en Laudrup. Ahora también en Valverde. Tanto es así, que el ‘15’ merengue ya suma siete asistencias (todas en Liga) lo que le convierte en el jugador del Real Madrid con más pases de gol igualado con Kroos, al que el imaginario colectivo del fútbol sí que atribuye esa faceta de pasador nato.

“Valverde es un jugador completo. Puede jugar al fútbol de muchas maneras”, lo describió a inicio de 2024 el mismo Ancelotti, cuando insistió en que era “difícil”, encontrar jugadores tan polivalentes. Otro cambio en Valverde. De hecho, el italiano recordó que en la consecución de la 14ª (2022), le tocó ejercer de extremo y lo bordó. Ahora el Real Madrid busca la 15ª, pero con el uruguayo centrado en otras funciones. Los blancos, por cierto, pese al cruce con el City, siguen siendo el tercer favorito a ganar la Champions en las apuestas de fútbol de Betfair con una probabilidad implícita del 14,28%.

Un Valverde “arrogante”

Con estas siete asistencias, Valverde iguala su registro de la temporada pasada y se acerca a la opción de llegar a los dobles dígitos en este apartado, algo que jamás había conseguido como profesional. En el de goles, se ha frenado su capacidad productiva, sí. Lleva solo un tanto. Pero también ahora el uruguayo se desplega en funciones de juego y posiciones diferentes que le llevan a tener que explotar otros recursos. El de asistente es uno de ellos.

Eso sí, su entrenador le pone un pero: “Es muy humilde (…) Yo los prefiero humildes y arrogantes. A veces un poco de arrogancia te hace ser más fuerte de carácter”, le aconsejó.  No es la primera vez que Ancelotti lanzaba un reto público al medio campista. La temporada pasada se jugó con él en sala de prensa que, si no marcaba más de 10 goles, dejaba el Real Madrid. Y los marcó.

Estadísticas impolutas

Ahora Valverde está poniendo en práctica el consejo de su entrenador, no sólo en el aspecto asistente, sino en el aspecto agresivo, con 196 recuperaciones en todo el curso y 129 duelos ganados, que es casi el 60% de los que ha protagonizado. A todo ello se le une su facilidad para regalar balones a sus compañeros. En el Sadar, ante Osasuna, dio dos pases de gol que pusieron broche a un partido impoluto, con sin una pérdida forzada y con solo 4 pases errados. Pese a que es jugador con imagen de tipo tosco, en verdad es algo más.

Tanto es así, que es el jugador del Real Madrid con más minutos en liga esta temporada, en total, 2.385 distribuidos en 29 encuentros (27 de titular) con una media de 82 minutos por duelo. Intocable. También infatigable. Sus virtudes físicas le permiten huír de las lesiones y ser siempre solución de Ancelotti para una medular que a veces juega con doble pivote (y ahí emerge Valverde) o con tres centrocampistas en el que él, Valverde, es una suerte de acordeón a medio camino entre la conexión con el ataque y la destrucción en el medio.

Precisamente esa capacidad de ser guardaespaldas del Real Madrid es una de las razones por las que Bellingham está brillando tanto esta temporada, esto es: con Valverde o Kroos ejerciendo de escuderos del inglés, se puede descolgar más para buscar el área y potenciar su nueva faceta de goleador. Trabajo en equipo que demuestra la mejoría y evolución del propio Valverde, pero también el ojo de Ancelotti para detectar funciones que hacen mejor el engranaje de un equipo que va viento en popa en Liga y aspira a intentar asaltar la Champions.