Cuándo saldrá Rosa Peral de la cárcel por el crimen de la Guardia Urbana

El crimen de la Guardia Urbana, cometido la noche del 1 de mayo de 2017, se ha convertido en uno de los homicidios más sonados en los últimos años, debido al triángulo amoroso, al calcinamiento del cuerpo de un hombre, y todo ello entre agentes de policía.

Rosa Peral fue condenada a 25 años de prisión por asesinar a Pedro Rodríguez, agente de la Guardia Urbana y su pareja. No solamente está ella involucrada en el homicidio, y es que Albert López, el amante de esta, también fue condenado a 20 años de cárcel.

Rosa Peral, preocupada por su futuro: "No creo que salga viva de prisión"

Hace unos meses que el caso estuvo en el foco mediático tras el estreno del documental 'Las cintas de Rosa Peral' y la serie 'El cuerpo en llamas'. Ahora, ha vuelto a ser noticia tras haber novedades: López ha asumido por primera vez el crimen, y Peral estudia pedir la revisión de la condena.

Tal y como dicta la sentencia, ambos "trazaron un plan con el fin de quitar la vida a la víctima, decidiendo finalmente ponerlo en marcha la noche del 1 al 2 de mayo de 2017". Aun así, la exagente policial fue condenada a 5 años más porque se le aplicó la agravante de parentesco al delito de asesinato, ya que mantenía una relación afectiva con Pedro Rodríguez.

Cuándo saldrá de la cárcel

Rosa Peral entró a prisión en 2017, y su condena acabará en 2042, cuando tenga 61 años. Sin embargo, según el Código Penal, podría salir antes si se le decreta la libertad condicional, si se encuentra en tercer grado y ha cumplido las tres cuartas partes de la pena impuesta (18 años y 8 meses) y si ha tenido buena conducta.

La acusada también puede pedir permisos penitenciarios y salir algunos días de la cárcel, pero antes de eso tendría que realizar un curso de prevención de delitos violentos.

Qué procesos abiertos tiene Rosa Peral

Además del crimen, el Juzgado de Instrucción número 5 de Tarragona tiene abierta una investigación contra la exagente policial y su padre, Francisco Peral, por un delito de ocultación de bienes.

Esto se debe a que Peral traspasó a nombre de su padre el coche y la mitad de su vivienda, que tenía a medias con su exmarido. En su declaración, Peral aseguró que como no podía hacer frente a los pagos de la hipoteca de su vivienda se la cedió a su progenitor, y negó que hiciese esta transacción para no pagar el dinero de la indemnización a la familia de la víctima.