El momento más amargo de Pablo Laso en el banquillo del Madrid

Pablo Laso vivió el momento más amargo desde que llegó al banquillo blanco

Pablo Laso vivió el momento más amargo desde que llegó al banquillo blanco / EFE

Ramon Palomar

Ramon Palomar

Uno de los marcados por la debacle del Real Madrid en esta edición express de la Liga Endesa, es su entrenador, el vitoriano Pablo Laso. Acostumbrado a luchar siempre por los títulos, tanto en ACB como en la Euroliga, ha vivido este viernes, en Valencia, uno de los momentos más amargos y humillantes de su carrera como entrenador blanco.

Jugar un partido cuando sabes que ya estás fuera de las semifinales, ha sido el castigo merecido que se lleva su equipo y el propio técnico después de tontear con su juego errático en una fase de grupos donde fallar una vez, era un aviso, pero sumar una segunda derrota, como le ocurrió ante el MoraBanc Andorra, prácticamente les llevaba al abismo.

Un equipo 'grande', con aires de NBA, estaba en manos de un Herbalife Gran Canaria para salvarle el cuello. Pero no ocurrió. Y el Valencia remataba a los blancos, que se iban de vacaciones con la moral por los suelos tras una temporada en la que sumaron la Supercopa Endesa y la Copa del Rey. Adiós al triplete. Una lección de humildad para los blancos, sin duda.

"Una competición especial"

Pablo Laso, en sus primeras declaraciones tras quedar fuera de semifinales, reconoció que "sabiamos que iba a ser una competición igualada, con partidos igualados", y no quiso entrar a analizar si el parón por la crisis del coronavirus, había sido el 'culpable' de que llegaran ahora en una forma muy inferior a marzo.

"No creo que pueda analizar eso ahora mismo", dijo con semblante serio. "Sabíamos que era un torneo especial por todo lo que ha pasado en España y la situación que hemos afrontado todos, pero ahora solo me interesa ganar al Zaragoza", dijo Laso, que tuvo que dirigir un partido que se hubiera querido ahorrar.

El técnico vitoriano, ya de vacaciones, vivirá las semifinales desde su casa, con el único deseo que su gran rival, el Barça, no le tome el relevo como campeón de la Liga Endesa. Un título ansiado para el Barça, que si lo consigue en Valencia, será claramente menospreciado desde la casa blanca.Habrá que esperar hasta el martes próximo.