Así consiguió Cristiano Ronaldo su cuerpo perfecto

Cristiano Ronaldo, estrella portuguesa del Real Madrid, es uno de los jugadores que cuida más su cuerpo. Cristiano Ronaldo es un jugador preocupado por su estado físico y que día tras día trabaja intensamente para estar siempre en óptima forma. La imagen de Cristiano Ronaldo mostrando pectorales y abdominales no es casual. Desde su etapa de juvenil, Cristiano Ronaldo ya tenía una cierta preocupación por cuidar su cuerpo.

Precisamente, Laszio Bölöni, que trabajó con Cristiano Ronaldo en el Sporting de Portugal cuando este aún era juvenil, ha concedido una entrevista a FIFA.com en la que explica, entre otras cosas, como ha conseguido Cristiano Ronaldo su musculatura su cuerpo perfecto. "Lo vi una sola vez, en un partido amistoso entre los sub-16 y los sub-18 del club, y decidí enseguida que, en cuanto pudiese, lo traería cerca de mí", comentó el entrenador húngaro. "Cuando vi el primer entrenamiento con el primer equipo, decidí enseguida que ya nunca lo soltaría", añadió Bölöni.

Bölöni le comunicó a Cristiano Ronaldo que se quedaba en el primer equipo, pese a que ese año solo podría jugar amistosos y desde entonces inició una relación con la estrella portuguesa en la que le intentó aportar sus ideas y su trabajo. "Era bastante severo con él, y fue así como el primer mensaje que empezó a comprender fue el de no exagerar, y no dar simplemente espectáculo. La eficacia debe anteponerse, pese a todas sus cualidades. A veces, basta con un simple cambio de ritmo, y no hay que hacer cinco, seis o siete bicicletas. Le enseñé un juego mucho más eficaz que el regate", explica el exjugador del Steaua de Bucarest.

Es en este apartado de la entrevista cuando Bölöni desvela la preparación a la que se sometió Cristiano Ronaldo para conseguir la musculatura y la explosividad que tiene actualmente: 

"Entonces jugaba de delantero centro; pero yo le eché a la banda, porque jugar entre dos defensas centrales de 90 kilos para un niño de 16 o 17 años era demasiado duro. Además, podía expresar mejor sus cualidades por la banda, sin perder su eficacia. Para mi gran satisfacción, cuando llegó al Manchester United, Alex Ferguson hizo lo mismo. Hoy tiene libertad, va donde quiere; pero entonces, creo que cambiar su posición era lo correcto. Como era demasiado joven y el reglamento le prohibía jugar con el primer equipo, le preparamos un programa especial de musculación y de explosividad para resistir a los contactos y, parafraseando a Aimé Jacquet, "muscular su juego". Él comprendió entonces que lo importante no era solamente esa técnica que los portugueses adoran, y por la que a veces pecan de exceso. Al impulsarle hacia la liga profesional, le permití encontrarse con grandes jugadores, y eso facilitó su desarrollo".