Ibrahimovic fusila el sueño del Southampton y el United alza la EFL Cup

Zlatan Ibrahimovic es el hombre de Mourinho. Una mortífera actuación del sueco dio al Manchester United el título de la EFL Cup ante un Southampton que mereció más. Los de Claude Puel remontaron dos goles en contra, pero acabaron sucumbiendo ante la pegada de los ‘red devils’. O, más bien, del gigante sueco.

Sin vergüenzas arrancaron los hombres, con la ilusión de volver a probar el dulce gusto de la victoria tras 41 años de sequía. Gabbiadini vio como se le anulaba un gol legal a los 10 minutos, y la réplica que recibieron fue la más amarga posible. Y es que el Manchester United, encerrado y torpe en la elaboración, acertó en su primer latigazo. Zlatan Ibrahimovic volvió a tirar del equipo, asumiendo la responsabilidad en una lejana falta. El potente tiro del sueco se encontró con la tardía reacción del meta Forster para acabar al fondo de la red.

Nada más lejos de la realidad, con los sureños insistiendo y atacando con más sentido, los hombres de Mourinho doblaron la ventaja. En una incursión por el carril izquierdo, Rojo cedió el balón para Lingard en la frontal. El inglés, completamente solo, tuvo tiempo para mandar el balón lejos del abasto de Forster. Incrédulo, el Southampton se encontró con un marcador más que cruel, al que dio. una luz de esperanza su héroe italiano al filo del descanso. Gabbiadini volvió a demostrar habilidad para colarse entre los centrales y leyó un centro de Ward-Prowse para rematar a gol, esta vez concedido, con la punta de la bota.

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Los hombres de Claude Puel alentaban a su grada en el camino a los vestuarios, y tras una sonora ovación respondieron con más fútbol. Redmond avisó a De Gea con un potente tiro que despejó el meta a córner. En el mismo servicio, un segundo balón quedó colgando en las inmediaciones de Gabbiadini, que no se lo pensó. El italiano empaló una volea a la media vuelta que dejó helado a De Gea, y en llamas a su afición.

La remontada de los ‘saints’ calmó los ánimos y dejó un partido de poder a poder, en el que ellos seguían llevando la manija del juego. Sin embargo el United avisó. Lo hizo a través de Lingard y Rashford antes del final, mientras que el Southampton tuvo en remate al palo de Oriol Romeu su mejor ocasión. No quedaba tiempo para casi nada, excpeto para Ibra. El sueco se alzó imponente y fusiló de un cabezazo, a tres minutos del final, las esperanzas rivales. Sonríe el United y sonríe Mou que, en un espeso partido, gana su primer título de la temporada.