MI PARTIDO

La noche que Suárez había soñado

Luis Suárez anotó su primer doblete para el Barça

Luis Suárez anotó su primer doblete para el Barça / sport

Josep Maria Casanovas

UN GRAN RESULTADO. Muy bueno teniendo en cuenta el valor doble de los goles en campo contrario. Una magnífica victoria frente al millonario Manchester City. Todos hubiésemos firmado encantados este marcador antes del partido. Sin embargo, escribiendo en caliente esta columna, tenemos una sensación agridulce. El 1-2 nos sabe a poco, nos deja tranquilos pero no satisfechos. El Barça estuvo cerca de dejar asegurado el pase a cuartos de final pero no aprovechó la oportunidad cuando en el último minuto, Messi, que había realizado un partidazo excepcional, falló un penalti y el remate siguiente a puerta vacía. No se merecía el argentino un trago tan amargo. Se fue del campo triste y cabizbajo reprochándose a sí mismo la ocasión perdida. Ni sus propios compañeros se atrevieron a consolarle conscientes del cabreo que llevaba. De todas formas, nada puede empañar un triunfo que vuelve a situar al Barça con el cartel de favorito en la Champions. Estamos convencidos de que en el conjunto de la eliminatoria el penalti fallado quedará como una simple anécdota. En el Camp Nou, Leo tendrá ganas de sacarse la espina y lo normal es que vuelvan a poner en evidencia al equipo de Pellegrini. El City sigue estando varios peldaños por debajo como se demostró en la primera parte cuando la superioridad barcelonista fue apabullante.

SUÁREZ ROMPE EL GAFE. El trabajo, sacrificio y generosidad, siempre tienen recompensa. Hasta ayer Suárez había destacado más por el juego de equipo que por sus goles. Su generosidad arrojaba un dato sorprendente, sumaba más asistencias que tantos. Anoche, en la Inglaterra que le lanzó a la fama, se rompió el maleficio. El uruguayo en media hora marcó dos tantos de auténtico cazagoles y se sintió otra vez importante, vivió la noche soñada. Se la merecía. A partir de ahora seguro que será más valiente, tirará más a portería, se atreverá en la acción individual. La confianza en un goleador es un factor clave y en este sentido ayer recibió dos inyecciones de moral que a buen seguro tendrán efectos positivos en su rendimiento. El uruguayo lleva un promedio fantástico en la Champions, un gol por partido, además, comienza a entenderse con los ojos cerrados con Messi lo que no deja de ser un privilegio. Tenemos la sensación de que Suárez va a llegar a la fase culminante de la temporada, cuando se deciden los títulos, en su mejor forma.