MI VERDAD

La conversación clave entre Luis Enrique y Messi

Messi llega muy justo al Clásico

Messi llega muy justo al Clásico / sport

Josep Mª Casanovas

¿QUÉ PAPEL JUGARÁ MESSI? El clásico del sábado viene marcado por dos coordenadas vitales, las extraordinarias medidas de seguridad que registrará el Bernabéu y la alineación de Messi que será el gran interrogante hasta el mismo día del partido. Por un lado, el Gobierno anuncia un dispositivo de seguridad sin precedentes en un evento deportivo, 1.000 policías controlando las entradas al estadio y 1.400 vigilantes de seguridad privada. Por otro lado, Luis Enrique no tiene previsto desvelar el papel que Messi va a jugar como estrategia táctica. Hay dos precedentes que conviene tener muy en cuenta. 4 de enero 2015. El Barça arranca el año en San Sebastián con Messi y Neymar en el banquillo y sufre una traumática derrota (1-0) que deja a Luis Enrique contra las cuerdas. Ocho meses después, 13 septiembre, el Barça visita el estadio del Atlético de Madrid y Messi inicialmente está en el banquillo. Es una decisión pactada después de que Leo fuera padre por segunda vez y no se hubiese entrenado en toda la semana. Entra en la segunda parte y desencalla el partido con el gol que dio los tres puntos. La visita al Bernabéu el sábado se produce en un contexto especial. Messi sale de una lesión que le ha tenido dos meses sin jugar y la gran duda es si jugará de inicio o se le reservará para la segunda parte.

VIAJARÁ Y JUGARÁ. Lo que está claro es que la decisión final será pactada entre el entrenador y el jugador. Luis Enrique sabe que Messi merece un trato especial y Messi es consciente de que no está para jugar los noventa minutos. Todo hace pensar que el mismo sábado tendrán  una conversación privada que se puede desarrollar en los siguientes términos.

- ¿Cómo te encuentras Leo?

-Bien míster, estoy bien.

-Te sientes con fuerzas para jugar de principio o prefieres esperar a la 

segunda parte.

-Lo que usted decida míster, yo estoy con ganas de jugar y ayudar al equipo.

A partir de aquí, el entrenador tomará la decisión que crea más oportuna consensuada con su staff técnico. Visto lo sucedido en el Vicente Calderón hace dos meses, puede prevalecer el criterio de reservarlo para la segunda parte para que sea el revulsivo. Lo único decidido, es que 

viajará y jugará.