Laporta, Benedito y Freixa ya no son oposición

proclamación oficial. Laporta decidió poner punto final a las elecciones del pasado sábado con una espantada del Camp Nou. No es correcto ni protocolario pero Laporta es así y nunca cambiará. Él mismo se ha cerrado la puerta para erigirse en una oposición seria, creíble e incluso necesaria. En lugar de asumir la derrota, agradecer los votos a sus más de 15.000 fieles y felicitar al campeón, Laporta prefirió huir. Una pena porque Laporta es un tipo valiente y en esta ocasión solo se le recordará por ser un mal perdedor. Ayer, sin ir más lejos, tampoco apareció en la proclamación de Bartomeu como nuevo presidente del Barça. Benedito, que sí asistió, es un caso sorprendente. Felicitó amablemente a Bartomeu pero sigue mareando la perdiz sobre el papel que ejercerá en el futuro. No se le puede discutir su barcelonismo ni su trabajo durante estos últimos años pero los resultados le obligan a marcharse definitivamente a casa.

Por su parte, Freixa, también presente ayer en el Camp Nou, podrá quedarse con el recuerdo de haber realizado una buena campaña electoral pero los resultados han sido tan pésimos que no le dan derecho alguno a proclamarse opositor oficial. Lo ha intentado y la inversión económica realizada le ha salido rentable porque ha mejorado notablemente su imagen, pero hasta aquí ha llegado su breve aventura. En fin, que a corto plazo, el presidente Bartomeu se ha quedado sin oposición. Eso, no es sinónimo de que a partir de ahora pueda hacer lo que quiera pero sí que le permitirá gestionar el club con una relativa tranquilidad. Ayer tomó posesión del cargo y mañana ya viajará a Estados Unidos con el equipo. Tiene los objetivos claros, el ego personal cubierto y muchas ganas de trabajar. Lo normal es que si le acompaña la suerte y los resultados deportivos, pasará un tiempo sin que aparezcan nuevos opositores. No obstante, el Barça es el Barça y nunca hay que descartar cualquier sorpresa..