Leicester se viste de fiesta para curar sus heridas

El King Power Stadium escuchará por primera vez  el himno de la Champions League, un sueño impensable hace apenas un año y que provocará una fiesta especial en Leicester, donde la hinchada espera impaciente el encuentro para curar las heridas de la Premier League.

No por haberlo avisado con antelación Claudio Ranieri la decepción ha sido menor con el impactante e irregular inicio de los zorros en el campeonato local, donde el sábado fueron goleados por el Manchester United para encajar la tercera derrota en seis jornadas y quedar once puntos por detrás del líder o a seis de los puestos de Champions.

Esta realidad del Leicester, sin embargo, no ha provocado que los aficionados hayan levantado la voz contra el equipo y en este estreno casero del torneo continental volverán a llenar las gradas y a ofrecer todo su apoyo a un equipo que debutó con una exhibición en Brujas y cuya victoria frente al Oporto podría acercarle a los octavos de final.

“Espero una corrección de mi equipo después del partido en Old Trafford” proclamó ayer Ranieri, después de haber admitido que en el partido de Manchester sus jugadores perdieron “la confianza” de la pasada temporada y destacar la “necesidad de reaccionar”.

“El Oporto es un rival muy peligroso, juega muy bien al fútbol y es especialmente difícil de combatir cuando tiene la posesión” sostuvo el entrenador italiano, suspirando por recuperar la imagen “que dimos en Brujas”.

Para ello el Leicester, que no podrá contar con Mendy, pondrá en el escenario a su equipo de gala, con la presencia especial de Slimany, llegado desde el Sporting y que en su etapa portuguesa le marcó hasta seis goles al Oporto, para ganarse el apodo de ‘Asesino del dragón’.

Enfrente, el Oporto, los dragoes, llegan a Inglaterra tras recuperar las buenas sensaciones el viernes frente al Boavista y la confianza en arrancar un resultado positivo que relance al equipo después de su decepcionante estreno frente al Copenhague.

Con el regreso al once titular de Héctor Herrera y la presencia de Brahimi en la punta, Nuno confía en dar un golpe de efecto y dejar claro que si hay un favorito en el grupo ese es su Oporto.