FC BARCELONA

Ter Stegen también gana el pulso con Claudio Bravo en la distancia

Marc-André Ter Stegen era, un año atrás, un portero cuestionado por sus pifias en Bilbao, Roma o Vigo. Tras ganar su pulso con Claudio Bravo, ya es el 'muro' del Barça 

Marc-André Ter Stegen ante Raffael durante el Borussia-Barça de la Champions 2016/17

Marc-André Ter Stegen ante Raffael durante el Borussia-Barça de la Champions 2016/17 / sport

Juan Manuel Díaz

Marc-André Ter Stegen vivió su regreso a Moenchengladbach, su casa, "su viejo amor", radiante y orgulloso. Aunque Thorgan Hazard le marcó un gol contra el que no pudo hacer nada, el meta renano pudo demostrar a sus paisanos en el Borussia-Barça (1-2) que ha logrado el objetivo que se marcó cuando dejó su ciudad y su familia: levantar el muro del Barça. Ha pasado de encajar 15 goles en 6 partidos a recibir solo 3 y dejar la portería a cero en la mitad de los encuentros.

A día de hoy, Ter Stegen ha ganado el pulso a Claudio Bravo, 'desterrado' el chileno a su exilio dorado en el Manchester City de Josep Guardiola. Y Marc-André ha vivido como una anécdota el debut de Jasper Cillessen, su rival a priori: el holandés fue el guardameta de la única derrota encajada por el Barça esta temporada en el nefasto partido frente al Alavés (1-2)

LA PESADILLA

Es una situación que hace exactamente un año resultaba impensable y que confirma la calidad del alemán como portero, pero también de su tenacidad y su fe en el inmenso talento que atesora como cancerbero. Si alguien cree que Ter Stegen debe ser el portero indiscutible del FC Barcelona y de Alemania, ese es el propio Ter Stegen.

La pesadilla empezó el 11 de agosto de 2015. Marc-André había adelantado el regreso de vacaciones para tomar delantera sobre Claudio Bravo. El premio fue empezar como titular en los primeros partidos oficiales de la temporada. El castigo, tener que lidiar en partidos en los que faltaban muchos futbolistas clave y el resto estaba todavía en rodaje.

Ese 11 de agosto el Barça sufrió de lo lindo para imponerse en la Supercopa de Europa al Sevilla (5-4). Solo el gol de Pedro en la prórroga doblegó a los andaluces, pero Ter Stegen se llevó cuatro 'chicharros' y en alguno de los goles generó dudas.

LA VASELINA DE SAN JOSÉ

Tres días después, la situación empeoró en la ida de la Supercopa de España. El Barça no se había recuperado del esfuerzo, Luis Enrique hizo rotaciones... y Ter Stegen se tragó un gol de vaselina de San José desde el medio del campo a los 13 minutos. Los blaugrana recibieron un 4-0 y perdieron sus opciones de título y de sextete.

Claudio Bravo tomó el relevo en la portería y este cerró la hemorragia -1 gol en tres partidos- pero una lesión del chileno ofreció otra oportunidad a Marc-André para reivindicarse.

No la aprovechó. Al contrario, su mala racha complicó la vida al equipo que sufrió para remontar y ganar al Atlético en la Liga (1-2). Peor todavía: Ter Stegen casi arruina el partido en Roma (1-1) al encajar otro gol desde el medio del campo obra de Florenzi (31') que neutralizaba el tanto de Luis Suárez (21').

LA PUNTILLA

Con el 4-1 al Levante pareció que amainaba la tormenta sobre Ter Stegen, pero llegó el 4-1 en Balaídos ante el Celta, el meta alemán volvió a quedar en entredicho y Claudio Bravo le ganó la partida hasta el punto de ser el meta en la Liga y en el Mundial de Clubes de Japón 2015.

Tras el debate, el juicio y la sentencia públicos, para Ter Stegen llegaron meses de trabajo más o menos en la sombra, reivindicándose en la Copa y en la Champions y una nueva lesión de Claudio Bravo lo devolvió a la titularidad en la recta final de la Liga, rindiendo ya a un excelente nivel.

VOLVER A EMPEZAR

En el arranque de la temporada 2016/17 Marc-André (y Claudio) no estaban dispuestos a mantener el difícil equilibrio que les exigía Luis Enrique y ambos forzaron la máquina. El Barça decidió, optó por el alemán y el premio de la apuesta ha sido un guardameta consolidado.

El penalti detenido en el Barça-Celtic (7-0) permitió a Ter Stegen brillar en una noche destinada par la 'MSN', pero además sirvió para que Marc André confirmara que, ahora sí, ya ha llegado el sucesor de Víctor Valdés: el portero total que se convierte en el primer jugador de campo y además, levanta el muro del Barça.  

Mientras, Bravo ha reemprendido su carrera en el Manchester City. El chileno ha encontrado en Pep Guardiola la continuidad que no le podía dar Luis Enrique en la Liga y en la Champions.

En pleno proceso de adaptación, Claudio fue cuestionado por el gol encajado frente al Manchester United en Old Trafford (1-2) y recibió tres más en el Celtic-Manchester City (3-3) de la Champions.

Con los 'cityzen' ha encajado 5 goles en 5 partidos (2 con la portería a cero) que sumados a los que disputó como blaugrana antes de su traspaso totalizan 7 goles encajados en 8 partidos (4 con la meta a cero).