El Celta arrolla a un Barça que se deja el liderato en Vigo

Tal y como había avisado Luis Enrique en la previa, el Celta salió a por todas desde el pitido inicial y encerró al FC Barcelona en su campo en los primeros compases del partido. Con presión alta, anticipación y una gran intensidad, el equipo celeste demostró el porqué de su buena clasificación. Fue toda una declaración de intenciones, como pudo comprobarse a lo largo de los noventa minutos.

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Liga BBVA · Jornada 5

RC Celta

4

1

FC Barcelona

Alineaciones

RC Celta
Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Sergi Gómez, Cabral, Jonny; Augusto (c), Radoja (Pablo Hernández, m. 76), Wass (Planas, m. 85); Orellana, Iago Aspas (Guidetti, m. 78) y Nolito.

FC Barcelona
Ter Stegen; Dani Alves, Piqué, Mascherano, Mathieu; Sergi Roberto (Munir m. 58), Busquets (Rakitic, m. 66), Iniesta (c); Messi, Luis Suárez y Neymar.

Goles

1-0, Nolito (m. 26). Dispara con toda la intención desde dentro del área para superar a Ter Stegen por su izquierda, ajustando el balón a la escuadra. 2-0, Iago Aspas (m. 30). A la contra, con la zurda y elevando el balón por encima de Ter Stegen después de un error de Piqué que aprovechó Nolito para lanzar al delantero local. 3-0, Iago Aspas (m. 56). A la contra, después de un saque de esquina del Barça, se plantó delante de Ter Stegen y lo superó con la zurda, ajustando el remate al poste. 3-1, Neymar (m. 80). Con la derecha, desde dentro del área, por debajo de las piernas de Sergio, después de una asistencia de Messi. 4-1, Guidetti (m. 83). 'Fusila' a Ter Stegen desde dentro del área después de una asistencia de Hugo Mallo que no llegó a despejar Piqué.

Árbitro

Alberto Undiano Mallenco (navarro). Mostró tarjetas amarillas a Busquets (m. 23) por derribar a Nolito, a Hugo Mallo (m. 79) por agarrar a Suárez, a Neymar (m. 89) por encararse a Hugo Mallo y a Sergi Gómez (m. 90) por derribar a Neymar.

Incidencias

Partido correspondiente a la quinta jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio de Balaídos ante unos 23.311 espectadores.

Trató el Barça de poner fin al en ocasiones hasta desbocado empuje local, pero los inicios del conjunto catalán fueron muy discretos como para oponer resistencia. Sin embargo, en el minuto 10, en una jugada dirigida por Iniesta, el Barça creó la primera ocasión clara del duelo por mediación de Messi, que obligó a Sergio a una brillante intervención.

Poco a poco el Barça fue tomando el pulso al partido y a hacerse con el control del balón, aunque siguió cometiendo errores puntuales en el pase, que aprovechó el Celta para salir a la contra con gran velocidad.

Sin embargo, la segunda oportunidad también cayó del lado barcelonista. En esta ocasión fue Neymar, tras una asistencia de Messi, quien se topó con el meta Sergio.

Cinco minutos fatídicos

Pero lejos de levantar el pie del acelerador, el Celta insistió en su planteamiento y dejó groggy al Barça en cinco minutos fatídicos, tiempo en el que anotó dos goles. El primero obra de Nolito al rematar <strong>con toda la intención a la escuadra</strong> izquierda (minuto 26) y el segundo de Iago Aspas (minuto 30), que aprovechó un error de Piqué para irse por velocidad hacia el marco barcelonista y superar a Ter Stegen con un toque de calidad.

No pudo cerrar la hemorragia el equipo de Luis Enrique, que suerte tuvo de no recibir un castigo mayor en los siguientes minutos. El Celta, insatisfecho con el resultado, siguió apuntando al marco de Ter Stegen sin piedad y Augusto, en el minuto 35, lanzó un zurdado por encima del larguero cuando el gol ya se cantaba en los graderíos.

Tímida reacción barcelonista y descanso

Reaccionó el Barça en la recta final del primer tiempo, después de que el Celta, en ocasiones, llegara a arrollar al Barça. Neymar estuvo muy cerca del gol, pero su disparo desde cerca lo sacó Augusto apareciendo rápidamente al corte. Se llegó al descanso sin que el árbitro añadiera ni un segundo y con el mosqueo de Busquets, que pidió penalti de Augusto por agarrarle de la muñeca en una acción que se cocinó en los últimos minutos.

El FC Barcelona sumó el quinto partido de Liga <strong>sin poder anotar un gol en los primeros 45 minutos</strong>.

Neymar, alto

La primera oportunidad del segundo tiempo corrió a cargo de Neymar, en el minuto 47, pero su disparo con la zurda salió alto. El Barça salió con otra actitud y buscando el marco de Sergio por todos los flancos al adelantar líneas Dani Alves y Mathieu.

Sin embargo, el Celta aprovechó cualquier error para salir a la contra, como cuando Busquets, en el minuto 51, perdió un balón que Iago Aspas estuvo muy cerca de convertir en el tercer gol. Su disparo, sin embargo, muy ajustado, salió lamiendo la base del poste derecho de Ter Stegen.

Messi, al poste

En el minuto 53 el Barça pudo recortar distancias por mediación de Messi, pero su disparo se estrelló en la madera, alargando así la <strong>desgracia del equipo esta temporada con los postes</strong>.

Piqué (de cabeza) y Messi volvieron a tener el gol, pero sus remates no llegaron al fondo de la red. El central remató alto y el delantero no pudo superar al meta Sergio.

La puntilla

Pero en un saque de esquina favorable al Barça se fraguó el 3-0, obra de Iago Aspas, que se subió a la moto y, desde su propio campo, se plantó ante Ter Stegen para superarlo con la zurda. Fue la puntilla. El Barça había hecho un esfuerzo para recortar diferencias y vio como en un plisplás el Celta la aumentaba...

Suárez y Neymar volvieron a poner a prueba a Sergio, que tuvo su gran noche. Pero el Barça no tenía su noche. Se le negaba el gol una y otra vez. El Celta, por contra, quería más y Nolito y Orellana volvieron a acercarse con peligro a los dominios barcelonistas. Los cambios -entraron Munir por Sergi Roberto en el minuto 58 y Rakitic por Busquets en el 66- tampoco tuvieron el efecto revulsivo esperado.

GolES de Neymar y Guidetti

Los últimos coletazos del partido dieron para mucho. Neymar recortó diferencias en el minuto 80, después de una asistencia de Messi, y Guidetti, en el 83, volvió a anotar par ael Celta.

Y las últimas ocasiones -salvo una de Messi en el minuto 88- fueron también para el equipo celeste, que aguantó muy bien físicamente y nunca perdió la concentración.