Occidente aumenta su presión sobre Georgia. Tras la aprobación de la polémica Ley de Trasparencia sobre Influencia Extranjera por parte del Parlamento del país, controlado por el partido gubernamental Sueño Georgiano, tanto la Unión Europea (UE) como Estados Unidos (EEUU), la OTAN e incluso la ONU, han condenado la iniciativa georgiana y han pedido a las autoridades que rectifiquen su decisión, que ya ha provocado semanas de multitudinarias protestas de activistas y opositores en las calles de Tbilisi. Manifestaciones que se ha vuelto a repetir también este miércoles.

EEUU y la UE redoblan la presión sobre Georgia por su polémica ley de agentes extranjeros de inspiración rusa (leer noticia)