Antoine Griezmann no se tomó demasiado bien que Didier Deschamps eligiera a Kylian Mbappé como el heredero de Hugo Lloris como primer capitán de la selección francesa. Por experiencia e importancia en la selección se veía ya como primer capitán, pero el seleccionador tenía otros planes para él. El delantero del Atlético mostró su cabreo ante Deschamps y Mbappé, pero finalmente aceptó la decisión.

Deschamps confirma el conflicto Mbappé-Griezmann (leer noticia)