Francesca Jones, la tenista que compite con ocho dedos

Es, sin duda, la tenista que más focos mediáticos acaparará en la fase previa de Wimbledon. Se trata de Francesca Jones (Leeds, 2000), una joven británica que recibió una invitación para disputar la fase previa del tercer Grand Slam de la temporada. Nació con un severo trastorno genético conocido como síndrome ECC (displasia ectodérmica). Solamente tiene cuatro dedos en cada una de sus manos, tres dedos en su pie derecho y cuatro en el izquierdo. Tiene menos dientes de los que suelen ser habituales y nació con el paladar hendido.

Pero esta joven británica, que está entre las diez mejores tenistas de Reino Unido y, actualmente, en la posición 297 del ranking WTA, no lo ve como una desventaja, más bien todo lo contrario. Será un reto mayúsculo para ella competir en una de las grandes citas del año. "Siempre digo que el placer más grande en esta vida es hacer lo que la gente dice que no puedes hacer. Diría que mi motivación", declara la joven de 18 años en una entrevista con Sky News. 

SE FORMÓ EN ESPAÑA

Su padre la llevó un campamento de tenis un verano y pronto vio que su hija tenía aptitudes más que suficientes para practicar este deporte con solvencia. Los apoyos en los desplazamientos, una de las partes más importantes en el tenis, no eran un problema. Todo lo contrario de lo que le dijeron los médicos que aseguraron que jamás podría vivir del deporte de la raqueta. "Pienso que nadie debería ser limitado por las opiniones de los demás", reitera. A sus nueve años y mientras cursaba sus estudios en primaria, Jones se trasladó a España. Puso rumbo, en concreto, a la Academia Sánchez-Casal en El Prat de Llobregat (Barcelona), donde también estuvo, anteriormente, su compatriota Andy Murray. Allí, de la mano de su principal tutor, Stefan Ortega, la tenista de Leeds creció a pasos agigantados.

Pocos años después, emprendió su aventura en solitario y su actual entrenador, el extenista español Albert Portas, habla maravillas de ella y de su potencial. "No es como el resto de jugadoras. Por supuesto tiene que trabajar específicamente algunas cosas porque su cuerpo es un poco diferente. Pero como puedes ver está dentro del 'top 300' y no tiene límites. Con ella, el límite está en su mente. Me impresiona mucho más que otras tenistas", asegura. Con dos triunfos consecutivos en dos ITF's de Minsk en estas últimas semanas se ganó la invitación por parte de la organización del grande británico. Y lo hizo por méritos propios. "Por ahora solo pienso en trabajar duro de forma constante e ir más allá de mis límites". Desde este lunes, Jones comienza su participación en la fase previa de Wimbledon. Y lo hará sin complejos. Una vez más.