Rafa Nadal fintó a Lajovic y a la lluvia

Rafa Nadal sigue sin perder en su debut en el US Open en trece participaciones. El tenista de Manacor dio cuenta del serbio Dusan Lajovic por 7-6 (6), 6-2 y 6-2 en dos horas y 16 minutos, una victoria que obliga a Roger Federer a tener que alcanzar, como mínimo, las semifinales del último Grand Slam del año si quiere seguir optando al número uno.

No fue un inicio arrollador como lo había sido en los tres ‘grandes’ de este año. Pero las circunstancias eran distintas a las esperadas: había que jugar en pista cubierta por culpa de la lluvia. “Es una sensación muy rara. El ruido. No oyes la bola...”, explicó Nadal después.

Al otro lado de la red, un Lajovic que sigue su progresión de la mano de Josep Perlas. Salió a jugar de tú a tú el serbio. Y la jugada le salió redonda al principio: ‘break’ temprano (1-2) que mantuvo ante un Rafa al que se veía incómodo, sin sentir la bola, jugando un metro por detrás de la línea de fondo y dejando las bolas a media pista. 

Lajovic, por el contrario, pegaba de drive y de revés y lograba puntos imposibles, de ésos con los que suele deleitar Nadal. Se le veía confiado... hasta que le tocó servir para el set.

Entonces cedió su saque y le abrió una puerta a Rafa para que se asentara. ‘Tie break’ extraño, de rachas para uno y otro, con doble falta incluida con punto de set del balear... que acabó imponiéndose y, con la manga en el bolsillo, todo cambió.

Empezó a jugar mejor, más agresivo, compensando los más que previsibles errores con golpes ganadores. Y aprovechando sin piedad las oportunidades. Los dos sets siguientes fueron, prácticamente, un calco: ‘break’ de inicio, distancia que ampliaría un poco más adelante y aunque Lajovic también rompió en una ocasión el saque de Nadal, las diferencias ya eran insalvables. 

La pérdida del segundo parcial ya fue una losa para el serbio. Porque si uno está jugando a su mejor nivel y el rival no lo hace ni de lejos y, aún así, te está ganando, el mazazo moral es importante.

Ahora Nadal ya piensa en las “cosas que hay a mejorar para el siguiente día”. El día en que se enfrente al vencedor del partido entre el japonés Taro Daniel y el estadounidense Tommy Paul. Y eso será el jueves.

Fue una jornada en la que sólo dos hombres pudieron acabar sus partidos. Y ésos fueron Rafa Nadal y Roger Federer, que juega esta madrugada. Ambos en la pista principal, ambos bajo techo.

Así bajo techo (con un solo juego en disputa) finalizó también el duelo entre la letona Jelena Ostapenko, la campeona de Roland Garros, y Lara Arruabarrena, que tuvo que interrumpirse, como la mayoría de partidos, por lluvia. Victoria de Ostapenko por 6-2, 1-6 y 6-1.

La jornada en las pistas exteriores del Billie Jean King National Tennis Center se canceló al mediodía. La lluvia no iba a dar tregua en todo el día.