Chris Froome, el olvidado

El cuatro veces vencedor del Tour se encuentra en la 165 plaza de la general con tan solo 12 corredores peor clasificados que él

Ya ha asumido el papel de gregario y solo espera ayudar a algún compañero de Israel a ganar una etapa de montaña

Froome, durante una de las etapas de este Tour

Froome, durante una de las etapas de este Tour / EFE

Sergi López-Egea

Sergi López-Egea

Está en el Tour y lleva el dorsal 31. Es el participante con más triunfos en París entre los inscritos: cuatro victorias posee Chris Froome, perdido en la general y con tan solo 12 corredores peor clasificados que él. No hay etapa en la que por una razón u otra pierda tiempo. Ya comenzó con mal pie pues se vio envuelto en las montoneras de la primera jornada. Pero ahí está, asumiendo el papel de gregario, sin que se le caigan los anillos y dispuesto a llegar a los Campos Elíseos en la posición que sea. Ya ha quedado como una fábula cualquier intención de pelear por un quinto triunfo para igualar a los mitos Jacques Anquetil, Eddy Merckx, Bernard Hinault y Miguel Induráin (Lance Armstrong con las siete victorias ha sido borrado de la historia de la carrera).

“No fui a toda velocidad porque mi objetivo será ayudar a algún compañero a ganar una etapa de montaña”. Así, con toda normalidad, rodeado de periodistas, habló Froome después de acabar la contrarreloj más discreta desde que se convirtió en uno de los astros de este deporte.

Si tiene que bajar al coche del Israel, su equipo, a por bidones, no pasa nada y si como ayer llega a más de 18 minutos de Matej Mohoric, el ganador del día, tampoco. Casi parece que ni le importe que antes de la gran montaña, con todo por decidir, ya esté a 50.38 minutos de un jersey amarillo que vistió en 2017 por última vez.

Vincenzo Nibali, que se coló en la escapada de Mathieu van der Poel, aunque al final cedió, ganó el Tour de 2014. Geraint Thomas, que también anda fastidiado desde que se cayó el lunes, se impuso en el de 2018. Con Froome, por supuesto, y sin olvidar a Tadej Pogacar, que defiende el título de 2020, son los corredores que participan en este Tour y que han vencido en la carrera en alguna ocasión.

Sin embargo, coleccionador cuatro victorias no está al alcance de muchos, de casi nadie, solo de Froome, con siete triunfos de etapa, una clasificación de la montaña (lograda en 2015 en su segunda victoria), al margen del segundo puesto logrado en 2012 y la tercera plaza de 2018.

Todo se torció cuando sufrió una brutal caída, mientras entrenaba para conocer el terreno por donde pasaba la contrarreloj del Critérium del Dauphiné de 2019. Froome tuvo que afrontar una larguísima recuperación y la verdad casi ha sido un milagro, al margen de resultados, que se haya subido a una bici y esté compitiendo no solo en el Tour sino como corredor profesional. 

Será difícil que regrese al Tour pero se sigue esperando una reacción, que se cuele una escapada, aunque no consiga la victoria. Es Froome, vencedor también de dos Vueltas y un Giro.