Luis Enrique aterriza en la España menos culé del siglo XXI

En la inolvidable noche del Soccer City, 11 de julio de 2010, la Selección española que se iba a proclamar campeona del mundo tenía un inevitable perfume culé en su alineación y en su libreto de juego. Piqué, Puyol, Busquets, Xavi, Iniesta, Pedro, Villa, más la salida al campo de Cesc y la presencia en el banquillo de Valdés hablaban bien a las claras de la preponderancia blaugrana en la mejor España de la historia. Ahora, ocho años más tarde, Luis Enrique Martínez aterriza en el banquillo con las tornas muy, muy cambiadas.

Y es que en la actualidad es nuevamente el Real Madrid el que marca la pauta en las últimas convocatorias (saldadas con resultados deportivos a años luz del cuatrienio mágico 2008-2012). Así, en ‘la Roja’ mandan ahora los Ramos, Isco, Asensio, Carvajal y compañía, por lo que muchos aguardan con expectación cómo puede sobrellevar el técnico gijonés dicha situación.

SE VAN LOS GRANDES 

El cambio de ciclo en España después del Mundial de Rusia se ha agudizado en las últimas fechas con las retiradas confirmadas de Gerard Piqué, el pasado sábado, y de David Silva, ayer lunes, y que se unieron al ya asumido adiós de Andrés Iniesta. Sin dos ‘cracks’ de ADN blaugrana como son el central y el ya jugador del Vissel Kobe, el actual FC Barcelona ve reducida su presencia en la selección a los habituales Jordi Alba y Busquets, a la espera de que Luis Enrique pueda sorprender, y lo hará a buen seguro, con su primera convocatoria. 

En muchas quinielas suena el nombre de Sergi Roberto, y más tras el mediocre Mundial realizado por los españoles, y la presencia del reusense aumentaría una cuota que ha ido disminuyendo de manera lenta pero constante a lo largo de estas últimas temporadas. 

También ha contribuido a ello la política de fichajes del conjunto blaugrana, de nuevo más enfocado al mercado exterior mientras las ‘perlas’ de las canteras hispanas, casos como Asensio, Vallejo o el más reciente de Odriozola, han acabado jugando de blanco y, posteriormente, en la Selección.

Con este panorama, Luis Enrique aterriza en Las Rozas con un gran reto por delante. Imprimir una idea de juego es una de sus primeras tareas, y el libreto blaugrana aparece en él como una referencia ineludible, pero.... ¿sin jugadores culés?