Noticia SPORT

Noticia SPORT

La junta directiva de la RFEF tendrá que ratificar a Roberto Moreno

Robert Moreno sustituye a Luis Enrique en la selección

Robert Moreno sustituye a Luis Enrique en la selección / PERFORM

Ramón Fuentes

Eran minutos antes de las tres de la tarde cuando saltaban todas las alarmas ante la convocatoria que realizaba la RFEF de urgencia para las cuatro de la tarde de Luis Rubiales, presidente de la RFEF y José Molina, Director deportivo. Minutos después confirmamos en SPORT que ésta implicaba el adiós de Luis Enrique y el relevo en el banquillo nacional de Robert Moreno, hasta ahora ayudante del asturiano.

Una decisión no exenta de lógica anunciada por el presidente de la RFEF y por el propio Molina pero que debe ser ratificada por la Junta directiva de la propia Federación Española de Fútbol. Y vamos a explicar el porqué.

Los Estatutos de la RFEF establecen dentro de las funciones de este órgano federativo la función de “designar, a propuesta del Presidente, a los seleccionadores nacionales como a su cuerpo técnico”. Así se hizo de hecho con motivo del anuncio del 9 de julio del 2018 tras la celebración en la Ciudad del Fútbol de la correspondiente Junta Directiva.

Algo que no se produjo en el día de ayer para la ratificación o designación de Robert Moreno como sustituto del entrenador asturiano que se ve obligado a dejar el cargo por motivos personales. No hubo Junta Directiva previa a esta decisión. Bien es cierto que a finales del 2018 la RFEF modificó sus Estatutos incluyendo al posibilidad de que “en caso de urgencia, o para facilitar la celebración  de las sesiones de distintos órganos, dichas reuniones se podrían celebrar mediante la utilización de cualesquiera medios telemáticos que faciliten el seguimiento o la acreditación de la entidad de los distintos miembros”.

Es decir, que en casos de máxima urgencia, esta podría celebrarse de manera telemática. Una decisión que se adoptó especialmente tras lo acontecido precisamente con la salida de Julen Lopetegui en el Mundial de Rusia y donde, dada la complejidad de la situación, no se pudo convocar ninguna Junta directiva al encontrarse la delegación española en tierras rusas y los miembros entonces de este órgano en la capital de España. De esta manera se buscaba subsanar o responder ante situaciones futuras similares.

Bien es cierto que tampoco ayer se realizó esta convocatoria por medios telemáticos de la Junta Directiva. Llegados a este punto existe la posibilidad de que Luis Rubiales se acogiera ayer para tomar esta decisión a la modificación recientemente aprobada de sus Estatutos en la Asamblea del pasado 10 de junio. Modificación que incluye, al margen de los medios telemáticos, la creación de un Comité de Emergencia conformado por “el Presidente, los Vicepresidentes, el Tesorero y Secretario General..que estará facultado para adoptar decisiones que fueren de competencia de Junta Directiva cuando existan circunstancia de urgencia o imperiosa necesidad”.

Decisiones que, como el propio artículo recoge, “deberán estar ratificadas en la primera reunión ordinaria o extraordinaria de la Junta Directiva si fuera necesario”. Dada la situación de excepcionalidad por la que está pasando Luis Enrique, puede entenderse que el presidente de la RFEF consideró acudir a este Comité de Urgencia para decidir el relevo en el banquillo de la selección.

Parece claro entonces que será en la próxima Junta Directiva cuando deberá incluirse en el orden del día la decisión adoptada por Luis Rubiales. Decisión que podría conllevar un riesgo considerando que estos Estatutos recientemente aprobados en Asamblea no han sido ratificados por la Comisión Directiva del CSD.

Trámite obligatorio para poder estar en vigor. Riesgo que pasa porque alguien decidiera impugnar el nombramiento del nuevo seleccionador considerando que no se ajusta a los Estatutos de la RFEF. Algo que inicialmente para poco viable considerando la excepcionalidad de la situación vivida en el día de ayer en la Ciudad del Futbol de las Rozas. Llegados a este punto parece claro que será en la próxima Junta cuando se incluya en el orden de día la ratificación de la decisión adoptada ayer.