El Bernabéu despide a Kroos como una leyenda y el once de Wembley no pasa del empate

El madridismo abrazó al medio alemán en el último partido en el Bernabéu, al que tantas noches de gloria ha dado

Ancelotti dispuso de inicio a los hombres que jugarán en Londres, que optaron por la 'no agresión' contra el Betis

Resumen, goles y highlights del Real Madrid 0 - 0 Betis de la jornada 38 de LaLiga EA Sports

Denís Iglesias

Toni Kroos es un futbolista que no pertenece a este tiempo, quizás por eso le gusta detener los relojes cuando tiene el balón en sus pies. Un jugador que, en lo más alto de su carrera, se retirará, obviando finales que le serían impropios, como Arabia Saudí o EEUU. Por eso no quería una despedida especial, pero el madridismo, que ya ha visto cómo leyendas se iban por la puerta de atrás, quiso brindarle un homenaje a su altura en el último partido en el Bernabéu. Un 0-0 ante el Betis marcado por la precaución de los madridistas y el protagonismo verdiblanco.

En el fondo, un tifo con el lema 'Gracias, leyenda', que recordaba los 22 títulos ganados por el '8' madridista. En el campo, un pasillo hecho por sus compañeros, que llevaban la camiseta de un Kroos que deja 464 partidos trabajados en el Real Madrid, con el que ha ganado tres Copas de Europa -antes conquistó una con el Bayern- y espera que sean cuatro. Ancelotti pensó en Wembley con el once que se enfrentará al Borussia Dortmund. El formado por Courtois; Carvajal, Rüdiger, Nacho, Mendy; Kroos, Camavinga, Valverde; Bellingham, Rodrygo y Vinicius.

"Te quiero, Kroos", desde la grada del Bernabéu

Una combinación de talento y veteranía que ha permitido al Real Madrid firmar una Liga inmaculada que se quedó sin emoción en la última jornada. De ahí que el gran aliciente era brindar una despedida de altura a Kroos, seguramente el mejor y uno de los pocos grandes profesionales que salió de Alemania del Este junto a Matthias Sammer y Michael Ballack, hombres de recta voluntad.

Anunciada la despedida, a Kroos solo le queda disfrutar, tanto de Wembley como de la Eurocopa, el único gran título que no ha conquistado y que encima se juega en el país por el que volvió a calzarse sus eternas Adidas Adipure 11Pro. Un modelo descatalogado desde hace años en el que la marca alemana ha visto un filón y del que ha sacado una edición especial. Sus dueños deberán cuidarlas tanto como el alemán.

Es icónica la imagen de Kroos limpiándolas después de cada partido. A alguno le causaba gracia, hasta que entendieron la enorme lección de respeto que era. Durante el partido contra el Betis, un mero enfrentamiento para Wembley en lo deportivo, se escuchaba cada cierto tiempo un alto y claro "Te quiero, Kroos". Balada triste de trompeta para un futbolista que a día de hoy es insustituible en cualquier equipo.

Gol anulado al Betis en un partido de precauciones

El Real Madrid es una gran constelación de estrellas que se ampliará con Mbappé o Endrick, pero tener hombres de fútbol y cerebrales como Kroos va a ser siempre imprescindible. Otros tendrán que dar un paso adelante -o este caso atrás, por la posición del '8'- como Bellingham o Camavinga. Pero tienen mucho que ganar y gestionar todavía para tener el expediente y aplomo del germano.

En lo futbolístico, el Real Madrid se mostró sin tensión en la primera parte, evitando la presión o golpes que comprometiesen la presencia en Wembley. Además, Pellegrini puso una buena dosis de juventud en el campo que superó en intensidad a un cuadro acomodado por lo logrado y lo que vendrá. Johnny Cardoso inauguró la cuenta en el 39 de partido, pero su tanto fue anulado por fuera de juego de Marc Roca.

Más comprometido en el gol quedó Courtois, con un mal despeje que no modifica su rol de titularísimo en Wembley frente a Lunin, al que buscaron rápidamente las cámaras para ver su reacción. Un juego de perspectivas inútil, porque el ucraniano nunca cambia el gesto.

En el Betis de Pellegrini el gran protagonista fue su meta suplente, Fran Vieites, un portero acostumbrado a vivir todo tipo de sinsabores, pero que sacó dos manos perfectas a Vinicius. En apenas unos meses, el gallego ha pasado de vivir como una tortura el fútbol a jugar el derbi contra el Sevilla, en el Bernabéu y frente al Barça. De este modo se llegó al descanso con apenas Carvajal o Vinicius conectados.

Último baile en el Bernabéu con Modric y ovación en el cambio

El segundo acto se abrió más y también sirvió de homenaje a Sokratis, veterano del Betis que cuajó una excelente actuación contra el extremo más desequilibrante del planeta. El Betis, con nueve bajas -Isco vio el partido desde la grada-, se movía a su antojo gracias a Ayoze, un jugador relacionado con el Barça, por si pudiera servir para mejorar el expediente. Viendo el desempeño de Vieites, Courtois quiso reclamar su protagonismo con una gran parada a Miranda.

Antes de ser sustituido por Kepa, al que Ancelotti permitió, como a Kroos, despedirse del Bernabéu. Un portero que no tuvo el protagonismo esperado, pero que ayudó a alimentar el nivel de Lunin. Más enigmática fue la salida de Nacho, capitán del Real Madrid que no ha decidido su futuro. Por eso es importante ser como Kroos, sencillo y directo, para el mundo te brinde el debido respeto.

Quiso tener el detalle Carletto de un último baile conjunto en el Bernabéu de Modric y Kroos. Una de las duplas más dominantes de la historia. Viendo que el tiempo se acababa, el alemán empezó a animarse con disparos, por redondear una noche inolvidable para él. Así, hasta el 85, cuando el hombre que nunca perdía un balón, el conductor impecable, salió del campo con una ovación unánime. Con abrazos de compañeros y rivales que no consiguieron que sacar una lágrima del mediocentro como sí lo lograron sus hijos. Adiós de (una) leyenda.