Redmond torpedea al Liverpool de Klopp

El pasado año acabó de forma memorable para el Liverpool superando al City en Anfield y consolidándose en la segunda plaza de la Premier. Después de la victoria contra los de Manchester, el equipo de Klopp no ha ganado ni un partido. Los ‘reds’ no han conseguido el triunfo en ninguno de los tres partidos que disputados en 2017, y la última factura la pagaron en Southampton en semifinales de la EFL Cup. Los ‘saints’ se impusieron por la mínima (1-0) y dejan al Liverpool necesitado de la mejor versión de Anfield para levantar la eliminatoria y plantarse en la final.

Daniel Sturridge fue la apuesta de Klopp en el once, dejando a Origi en el banquillo, pero la apuesta no salió bien. El delantero inglés, hambriento de minutos, desaprovecho una oportunidad y acabó ofuscado, como su equipo, más plano de lo habitual y que notó la baja de Mané. Mucho mérito de la apagada actuación tuvo el Southampton, aguerrido al factor campo y hábil para explotar sus virtudes esperando en su campo a su rival.

Un espejismo fue la primera ocasión del partido, y prácticamente la única del bando local en la primera mitad. Firmino fue el primero en golpear, Forster la salvó, y el Southampton se puso el cuchillo entre los dientes. Redmond fue la punta de lanza de los locales, que supieron generar problemas a una defensa poco móvil en hombres como Klavan o Milner. De eso se aprovechó Tadic para conducir un contragolpe vertical, que desbordó a la defensa visitante. El serbio filtró un pase raso para Redmond, que llegando en velocidad solo tuvo que cruzar el balón ante Karius.

Coutinho no fue suficiente

Un Loris Karius que, pese a ser discutido, fue el hombre del partido para los ‘scousers’. El portero alemán se reivindicó bajo los palos salvando en varias ocasiones a su equipo, y frustró a un Redmond que podría haber ampliado su cuenta en dos ocasiones.

Sin síntomas de reacción, Jürgen Klopp apostó por hacer reaparecer a Coutinho, pero ni en esas se despertó un Liverpool congelado, y volvió a ser el Southampton quien copó las mejores llegadas. Los hombres de Claude Puel consiguieron domar el Liverpool e incluso tuvieron el segundo antes del final en una vaselina de Redmond que salvó Lovren sobre la línea. El Southampton consiguió una merecida victoria, pero el Liverpool salió vivo del primer asalto de las semifinales. Anfield dictaminará, dentro de dos semanas, qué equipo estará en Wembley.