"Parecía 'Forrest Gump'": Evan González, la argentina que fue de Frankfurt a Madrid en patinete eléctrico

"La gente me veía por las redes y venía a escoltarme con motos y coches", asegura esta atleta que recorrió los 2.150 kilómetros que unen ambas ciudades, un récord mundial

Evan González tras conseguir el récord mundial

Evan González tras conseguir el récord mundial / EL PERIÓDICO DE ESPAÑA

Isabel Guillén

Tormentas, rachas de fuertes vientos y estanques de barro. Estos son solo algunos de los problemas a los que Evan González ha tenido que enfrentarse durante sus travesías alrededor del mundo, encima de un patinete eléctrico. Porque, tal y como ella se advertía a sí misma antes de empezar, "el mapa no es la ruta real y toda la logística prearmada puede venirse abajo en un segundo".

De Frankfurt a Madrid, pasando por Costa Rica, Portugal o Luxemburgo, esta joven argentina de 28 años lleva toda la vida sobre ruedas, entrenando duro, siendo constante y combatiendo la soledad a través de una pantalla. Su última hazaña ha dejado una marca imborrable en la historia de los récords, al recorrer 2.150 km en patinete eléctrico desde Frankfurt hasta Madrid, en 31 días, avanzando entre 80 y 100 km cada día.

A pesar de todas las inclemencias del tiempo y los problemas físicos, cuando sentía que sus piernas no podrían aguantar ni un minuto más, la argentina sacaba un ápice de fuerza gracias a sus seguidores. "La gente me veía por las redes y venía a escoltarme con motos y coches, parecía la película de 'Forrest Gump'. Iban todos detrás de mí", cuenta a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA

¿Y si bato el récord del mundo?

Todo comenzó hace 28 años. Evan González nació en la ciudad de Mendoza, en un entorno humilde, donde surgió su pasión por viajar. A los 18 años, decidió convertir su sueño de explorar el mundo en una realidad, financiando sus viajes con actuaciones en la calle. "Empecé a alquilar patinetes, hasta que hace cinco años me compré uno de muy mala calidad. Ahí me enamoré y vi que podía recorrer muchos kilómetros", explica.

El problema es que la novedad de este deporte y el alto costo de sus viajes le impedían hacer realidad los sueños que dibujaba en su mente: "Se fue desarrollando la idea dentro de mí, pero no llegué a hacerla real hasta hace dos años, cuando conseguí patrocinadores, porque yo sola no tenía recursos para costeármelo".

El primer país que atravesó con un monopatín eléctrico fue Luxemburgo. Más tarde, emprendió una serie de retos a los que llama '1KM+', un lema que inspira a continuar y avanzar cuando el camino se pone difícil. Desde ese momento, algo en su mente hizo clic y pensó: "¿Y si bato el récord del mundo?".

Ya contaba con la motivación y la financiación, así que empezó a prepararse. "Obviamente, voy al gimnasio, entreno piernas y salgo a correr, pero la única forma de entrenar el cuerpo para semejante travesía es subirte al 'skate'", dice Evan. Era el momento de ponerse manos, o mejor dicho, pies a la obra.

Primero, cruzó Portugal, después realizó dos travesías en Costa Rica, para posteriormente convertirse en la primera mujer en recorrer el Camino de Santiago en patinete eléctrico, en 12 días.

"Empecé poco a poco porque para hacer 2.150 kilómetros hay que entrenar mucho. El primero que hice fue Portugal, que fueron 900 km, luego hice dos travesías en Costa Rica, de 700 km cada una y la prueba final fue este verano en el Camino de Santiago", explica la argentina.

Los obstáculos del camino

España le ha traído muchos problemas a Evan González. De hecho, aquí ha sufrido los momentos más tensos y duros antes de conseguir el récord mundial. La deportista realiza sus recorridos por rutas secundarias, ya que si no sería ilegal. Esto, unido a las inclemencias climáticas del norte de nuestro país, se lo puso muy difícil.

"La última semana en España fue muy complicada porque había fuertes rachas de viento en contra, lluvia y barro. Tuve que cambiar la ruta. Tenía pensado ir a Burgos y bajar hasta Segovia, pero cambié en el último momento porque mis piernas no aguantaban más", cuenta.

Una vez adentrada en la montaña, se dio cuenta de que había tomado una mala decisión: "Me metí en la montaña y me quedé sin batería. Al final conseguí llegar al hotel y me trataron supermal. Ese día exploté".

Hasta nueve horas encima de un patinete

"Eso no tiene esfuerzo, búscate un trabajo". Estos son algunos de los comentarios que Evan ha tenido que escuchar durante los últimos años. Críticas sin fundamento a las que ella responde con una propuesta: "Haz una sentadilla estática con una mochila en tu casa y verás que no te aguantas ni dos o tres horas, pues imagínate haciendo balance y durante 8 o nueve horas al día".

Y es que ir en un patinete eléctrico en el que no tienes donde agarrarte implica estar haciendo una sentadilla durante ocho o nueve horas, al mismo tiempo que haces equilibrio. "Hay que entrenar duro para soportar el peso en la parte alta de la pierna. Además, la planta del pie se adormece. Quien lo critica es porque no lo ha probado", afirma la argentina.

En cuanto a los sitios para dormir y comer, la improvisación era inevitable. "Aunque tenga una planificación para poder estimar el presupuesto, esto puede desarmarse en un segundo. Por lo que la mayoría de veces tengo que dormir y comer en sitios diferentes a los que había planeado", asegura.

La fuerza de sus seguidores

Mientras realiza estas travesías, la deportista comparte su día a día en redes sociales. Son precisamente sus seguidores los que la ayudan a combatir la soledad: "Cuando estás 31 días viajando sola, está genial ir contando lo que te pasa a alguien".

Todo ello mientras viaja encima de su patinete, desde el que también escribe a sus seres queridos, para informarles de su travesía. La cuestión es no dejar de sumar kilómetros, ya sea mientras disfruta del paisaje o graba un vídeo para Instagram.

Gracias al contacto con la gente, Evan González es hoy la persona que mayor distancia ha recorrido en patinete eléctrico del mundo. "Cerca de Soria, por ejemplo, hay pueblos de tan solo 20 personas, allí charlé con la gente y me di cuenta de que había una realidad muy diferente. Lo mismo me pasó en mis travesías en Costa Rica, cuando la gente recreaba las escenas de 'Forrest Gump' siguiéndome", cuenta la argentina.

Próximos retos

La deportista e 'influencer' no tiene límites y continuará con su desafío 'cinco países, cinco continentes'. Su próximo destino: la Patagonia en marzo.

Querer es poder y ella seguirá sumando kilómetros hasta que sus piernas le pidan lo contrario, con su monopatín, realizando viajes llenos de momentos inolvidables. ¿Quieres verla en directo? Entra en su cuenta de Instagram (@alinfinitoo), busca su próxima ruta y conviértete en una de esas personas que recrean las escenas de 'Forrest Gump' en pleno siglo XXI.

Este último logro de Evan González es la culminación de una serie de experiencias que le han permitido fortalecer su cuerpo y mente, para enfrentar los desafíos más inesperados en las rutas. Con muchas caídas, pero sin romperse ni un solo hueso. Y así seguirá, porque no está dispuesta a parar. "Hasta que mis piernas aguanten", dice. Como sus redes sociales indican: hasta el infinito y más allá.