Xavi, Messi y la Liga

Cuesta entender que algunos culés parecen estar más entusiasmados porque el City conquiste su primera Champions que por celebrar la primera Liga de Xavi. Pep Guardiola suele repetir que el fútbol no tiene memoria y lleva mucha razón. El Barça tiene la Liga al alcance de la mano tras tres años de sequía y el entorno sigue cuestionando el estilo y el rendimiento de algunos futbolistas en lugar de prepararse para festejarlo por todo lo alto.

Tiempo habrá para la reflexión y la crítica. Suerte que Xavi es de la casa y sabe de qué va esto. Cualquier otro entrenador, llegado de fuera, alucinaría si en su primera temporada completa fuese cuestionado a pocas jornadas de conquistar el título. Sin embargo, esto, aquí es lo normal. Porque aquí solo vale ganar, jugando bien y que los principales actores sean de tu cuerda. Recuerdo todavía algunos oportunistas que tras el irregular inicio de la primera temporada de Guardiola como entrenador del Barça llegaron a pronosticar que no se comería los turrones.

En fin. Ahora ya hay quien duda de Xavi porque no está al nivel de Pep. O quizá lo que realmente ocurre es que dudan de Xavi porque no les cae tan bien como Pep. Esto es el entorno que tan bien definió Johan Cruyff.

Xavi no lo ha hecho todo bien, sus futbolistas tampoco, algunos más mal que bien, pero ahora todos los esfuerzos deberían centrarse en apoyar al equipo para rematar la Liga. De lo contrario, corren el riesgo de sufrir un nuevo traspiés. Y si eso ocurre, verán como desde la capital van todos a una. Y cuidado si se lo creen. Allí en los momentos decisivos van todos a una y no hay entorno que pueda con ellos.

Y lo mismo ocurre con Messi. Entiendo que se exista un debate previo sobre su regreso, pero si al final vuelve, que volverá, todo el barcelonismo debería remar en un mismo sentido. Xavi lo quiere, el club también, los jugadores lo aprueban y Leo va loco por volver. Acaba de ganar un Mundial y solo le falta despedirse del Barça como se merece. ¿Por qué no intentarlo?

Su llegada traerá nuevos ingresos, volverán a venderse más camisetas, más de uno que no quería subir a Montjuic lo hará y dicen los que entiende que todavía está para jugar un año más a tope. Pues eso, que quizá Messi sea una buena excusa para que todo el barcelonismo camine unido. Veremos.

La música une a dos vicepresidentes

El chef, David Muñoz con Carles Puyol