¿Vendrá Neymar? La pregunta del millón no tiene respuesta
El brasileño se ha convertido en el gran tema de conversación entre los aficionados barcelonistas. No se habla de otra cosa. Y la pregunta que todos se hacen es la misma: ¿Vendrá Neymar? Una cuestión que a día de hoy no tiene respuesta. Nadie sabe lo que puede pasar. Es la pregunta del millón, una incógnita total ya que las conversaciones a nivel oficial ni tan siquiera han comenzado. Estamos en tiempo de especulaciones, rumores y suposiciones.
Hace un mes esta polémica no existía. Neymar no figuraba en los planes deportivos del Barça. Es más, su trayectoria en París, llena de escándalos, lesiones y fiestas, había eclipsado al futbolista. El último año se habló más de sus líos que de sus títulos. Consecuencia de este bajo rendimiento fueron las duras declaraciones del presidente del PSG, Nasser Al Khelaïfi, acusándole de mal profesional y abriendo la puerta de salida. Neymar lo tomó al pie de la letra y anunció a su entorno que ya podían buscarle equipo que no volvería a jugar a París. A partir de aquí se dispara la rumorología y el Barça es metido en el baile.
de farol
Neymar quiere volver al Camp Nou. El Barça se deja querer. El PSG hace de trilero y esconde sus cartas. Nasser Al Khelaïfi es el único que tiene la llave de la operación. Los demás de momento juegan de farol. El jugador tiene contrato en vigor, si se planta y no lo cumple, será denunciado a la FIFA. El Barça, por mucho que haya llegado a un acuerdo con el jugador para que retire la querella, rebaje su ficha y reconozca que se equivocó marchándose, no puede reconocer estos avances ya que sería motivo de sanción por negociar con un jugador que tiene contrato hasta el 2022. Los catarís tienen la sartén por el mango, de poco sirve que algunos intermediarios mareen la perdiz en busca de una suculenta comisión.
Los jeques de Catar no se lo pondrán fácil a Neymar. Son orgullosos y rencorosos. Consideran que el brasileño les ha engañado y traicionado. Le pasarán factura ya que no quieren cerrar esta operación como unos perdedores. Lo mismo vale para el Barça. Nasser Al Khelaïfi se la tiene jurada a Bartomeu que intentó quitarle varios jugadores en vano. Tampoco olvidan que pagaron 222 millones por lo que tenía que ser una inversión y se ha convertido en un fiasco. De salida fijan en 300 millones el coste del traspaso. Conscientes de que el Barça no tiene liquidez para afrontar una operación de este calibre, saben que la única solución sería aceptar jugadores a cambio, dos mejor que uno, Coutinho y Dembélé. No están por ayudar a Neymar ni hacer ningún regalo al Barça.
humo de colores
De momento todo es humo de colores. Deseos más que realidades. Bartomeu escucha y calla. Valverde no sabe ni contesta. Pep Segura presencia el espectáculo consciente de que su papel es el de actor secundario. Algunos directivos dicen con la boca pequeña que dimitirán si sale la operación. Las vacas sagradas del equipo quieren que venga Ney porque es amigo y colega, aunque ya saben que Griezmann es prioritario. Bartomeu, de acuerdo con Valverde, ha decidido pagar la cláusula del francés sí o sí.
Resumiendo, el francés viene seguro y el brasileño… Nasser Al Khelaïfi dirá.
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