Precioso partido de ida y vuelta

Ivan Rakitic colaboró con un gol a la victoria del Barça

Ivan Rakitic colaboró con un gol a la victoria del Barça / EFE

Pichi Alonso

Pichi Alonso

Partido bellísimo sin especulación alguna el que disputaron el Sevilla y el Barcelona en el Camp Nou con victoria azulgrana que le devuelve el liderato. Ambos equipos no jugaron en el centro del campo sino que los dos goles iniciales del Barcelona y, la consecuente diferencia en el marcador, provocó que fuese un partido abierto, con ideas y vueltas sin descanso. 

Está claro que el tempranero gol de Coutinho y el de Messi, e incluso la lesión de éste último, provocó que el Sevilla fuera un equipo valiente, buscando la portería de Ter Stegen siendo Navas el mayor peligro de los andaluces y que está en un gran momento de forma.

Fue un partido de máxima velocidad e intensidad donde el centro del campo fue una zona de paso, no de elaboración de juego. Nula especulación mediante transiciones defensa-ataque, razón por la cual el partido acabó con tantos goles, algunos de ellos preciosos.

Lo peor es sin duda la lesión de Messi, cuya participación en los próximos paridos es una incógnita. Fue doloroso verlo en el suelo quejáqndose de dolor. Veremos cual es el pronóstico pero sin duda el partido quedó algo desangelado sin Leo en el terreno de juego. El Barça estuvo listo en sus acciones siendo clave el tanto de Luis Suárez, que se fabricó él solo con un penalty que le sirve para acabar con la mala racha por la que atravesaba. Papel significativo es el de Ter Stegen cuyas dos acciones fueron espectaculares. En el debe del equipo, evidentemente, vuelven a ser los goles encajados. No hay partido que acabe con cero goles, una virtud que poseía este equipo en un pasado reciente. El Barça debe mejorar en este aspecto para ser más consistente.