El MessiPedrismo es la llave del futuro

La magia de Europa: Pedri debutó como goleador

La magia de Europa: Pedri debutó como goleador  / MEDIAPRO

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Se veía venir, Pedri, dieciocho años recién cumplidos, es lo más parecido a los tótems del tiqui taca que han hecho grande al Barça. Messi tenía esos mismos dieciocho años hace quince temporadas, cuando emergió como el futuro mejor futbolista de todos los tiempos junto a Xavi e Iniesta, también junto a Ronaldinho los primeros años, así que podemos establecer un paralelismo, muy primario o generoso, si ustedes quieren, pero algo hay ahí que nos hace ser optimistas.

Digo que se veía venir desde hace semanas y se confirmó el martes en Valladolid, cuando a Messi le liberaron por fin de la hipoteca de tener que compartir espacio con Coutinho y Griezmann y le pusieron a uno que ve el fútbol como él. El resultado fue una explosión de buen fútbol. Un nuevo tiqui taca de alta calidad, una conexión inmensa, el nacimiento de una nueva sociedad que puede cambiar el futuro del club. Ha nacido el Messipedrismo, bienvenidos al nuevo orden del mejor espectáculo del mundo. 

LA LUZ AL FINAL DEL TÚNEL

Es especialmente importante para el futuro de Messi en el Barça la irrupción de este joven talento canario. Lo de Messi y el Barça no es más que una cuestión de ilusión y motivación. Hasta hace unas semanas, Leo lo veía todo oscuro, no había luz en el túnel de mediocridad en el que se había introducido el equipo azulgrana. Pero, de pronto, Pedri lo ha cambiado todo. Es la piedra filosofal sobre la que ha de asentarse el futuro del club.

También Ansu Fati, que ahora lamentablemente está fuera de circulación por lesión. Pero Messi necesitaba un talento al que asociarse para alimentar su esperanza de que el Barça siga siendo el hábitat en el que continuar siendo feliz. Pedri necesita más a Messi que al revés, para aprender y crecer junto al más grande de todos los tiempos. Pero Messi también necesita a un talento inmenso para seguir creyendo en el Barça de toda la vida. El Messipedrismo es la llave del futuro, de la reconstrucción de otro Barça ganador a partir de su propia esencia. Hablar de Pedri como el nuevo Iniesta puede que sea demasiado atrevido. Pero decir que Pedri será muy, muy, grande, no lo es. Y Messi lo sabe. Igual por cinco millones tenemos a Pedri y a Messi. Igual. Ojalá. 

La clave: Leo necesitaba una luz para seguir creyendo que el Barça es su hábitat de felicidad.