Si el Madrid quiere guerra, tendrá guerra...

Florentino y Laporta, protagonistas del clásico

Florentino y Laporta, protagonistas del clásico / EFE

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

En el Barça se respira un ambiente de máxima tensión por la deriva que está tomando el ‘caso Negreira’. Y la decisión de Florentino Pérez de convocar de forma urgente a su junta directiva esta mañana para decidir qué actuaciones van a seguir tras la denuncia de la Fiscalía ha encendido aún más todas las alarmas. El prudente (para algunos, sorprendente) silencio que había mantenido hasta ahora el club blanco por la ‘complicidad’ entre Florentino y Laporta era entendido por muchos como una forma definitiva de mantenerse al margen del conflicto. Barça y Madrid tienen muchos intereses comunes, entre ellos la Superliga, y parecía que había un pacto de no agresión. Pero las presiones de los socios y de la caverna mediática han hecho modificar la estrategia del presidente madridista. Y esta maniobra inesperada (el Madrid podría decidir hoy personarse en el caso como parte afectada) puede desencadenar una batalla de consecuencias imprevisibles.

Porque el Madrid no es, precisamente, un club que pueda presumir de tener las manos limpias en los temas arbitrales. La historia está repleta de ejemplos de cómo el Madrid ha recibido ayudas de todo tipo (incluso políticas) para ganar títulos. En España y en Europa. Solo hace falta recordar cómo conquistó sus primeros triunfos continentales. O como logró que Di Stefano no fichara por el Barça... Parece que ahora nadie se acuerda (o quiere acordarse) de los tenebrosos tiempos del NO-DO. Si el Madrid comete el grave error de destapar la caja de los truenos, la guerra será sin cuartel. Y puede haber muchas víctimas. La verdad debe ver la luz. La verdad de ahora y la verdad del pasado.

DOS FINALES EN UNA SEMANA

Que todo esto suceda en vísperas de dos clásicos decisivos para la Liga y la Copa no es casualidad. Se trata de desestabilizar al Barça como sea. Afortunadamente, el equipo está protegido por Laporta y Xavi. Tanto el presidente como el entrenador han formado sendos escudos para impedir que toda la polémica afecte a la plantilla. El conjunto blaugrana puede sentenciar el título liguero si gana los dos partidos que disputa esta semana: esta noche en San Mamés ante el Athletic y el próximo domingo en el Camp Nou contra un Madrid que ayer no falló ante el Espanyol y disminuyó momentáneamente la ventaja con el Barça. Son dos finales vitales para un equipo que necesita esta Liga para avanzar en su proyecto de reconstrucción. El ‘caso Negreira’ no debe ensombrecer el enorme éxito que significaría volver a ser campeones.