Una Liga muy viva en un año atípico

Leo Messi, tras anotar el 1-1 ante el PSG

Leo Messi, tras anotar el 1-1 ante el PSG

Jordi Cruyff

Jordi Cruyff

No era fácil que el Barça ofreciera tan buenas sensaciones en París, sobre todo en la primera parte, siendo consciente de que se trataba de un objetivo muy difícil de conseguir. Pero ofrecer una imagen buena ha ayudado a alimentar esa dinámica positiva en la que se encuentra, con un pulso por La Liga que está muy vivo y una final de Copa del Rey en el horizonte. 

Lo que sí parece claro esta temporada es que a los equipos de arriba les está costando ganar en partidos que tiempo atrás hubieran sido un trámite superable. Y eso facilita que estemos antes una recta final emocionante de campaña. El Real Madrid sufrió para doblegar al Elche, el Atlético de Madrid se dejó dos puntos en Getafe y el mismo Barça no logró superar al Cádiz semanas atrás. Pero sí está ofreciendo mejor dinámica que sus rivales en 2021 en un momento en el que los colchoneros están viendo cómo sus perseguidores están recortando distancias rápidamente.

Pero no nos engañemos, la temporada se está haciendo muy cuesta arriba para todos. Y a todos los equipos les está costando más de lo que nos imaginamos mantener su fuerza mental y física, en un calendario que está resultando muy largo, marcado por un periplo por estadios vacíos sin el aliento de la afición en la grada. Sumado al desgaste que ha supuesto la incertidumbre por la suspensión de campeonatos domésticos y torneos internacionales. Acabamos de cumplir un año de la crisis sanitaria del coronavirus y la fatiga pandémica que se está haciendo sentir en la sociedad inevitablemente se hace extensible al fútbol.

Cuando se mezclan compromisos europeos con La Liga, ese recorrido se está haciendo aún más duro. Más si cabe en el caso de equipos como el Atlético que se han visto obligados a viajar fuera de España para jugar partidos ‘en casa’ por las restricciones a pasajeros procedentes de Reino Unido. El calendario ya está suficientemente comprimido como para tener que viajar a Rumanía en medio de una semana que hubiera sido más cómoda sin desplazamientos imprevistos. Y eso necesariamente hace mella en las fuerzas de tus jugadores.

El destino del Barça en liga dependerá en parte del desenlace de los octavos de Liga de Campeones para el Real Madrid y el Atlético de Madrid esta semana. La Champions seguirá siendo una prioridad para los dos sin logran meterse en cuartos de final y tienen que hacer rotaciones en liga. Pero el Barça debe seguir haciendo lo que ha hecho hasta ahora, centrarse en su particular partido a partido, sin obsesionarse con el destino de sus rivales ni el duelo directo que le espera con los rojiblancos en mayo. Hace dos o tres meses la liga estaba muerta, ahora está muy viva en este año atípico, en el fútbol y en la vida.

ME GUSTA

La vuelta del público al fútbol. Desde Inglaterra nos llegan noticias esperanzadoras que apuntan a la posibilidad de estadios llenos en la próxima temporada. Otros países no tienen claro el horizonte para volver ver al público en los estadios. Lo que demuestra que volver a la normalidad depende también una campaña de vacunación masiva.

NO ME GUSTA

La sanción a Mapi León. Es un tema sensible: ¿las redes sociales también deben ser objeto de censura arbitral? Desde fuera resulta exagerado cuatro partidos de sanción y 600 euros de multa por un tuit producto de la frustración, sin faltar al respeto. Al menos el Comité de Apelación ha suspendido cautelarmente el castigo.