Carletto, el mejor embajador para el Real Madrid

Ancelotti, en la rueda de prensa

Ancelotti, en la rueda de prensa / EFE

Francesc J. Gimeno

Francesc J. Gimeno

Carlo Ancelotti tiene muy claro que quiere seguir un año más al frente del Real Madrid, aunque la decisión, tal y como enfatizó, es "del club", el eufemismo que siempre se utiliza para no nombrar a Florentino Pérez, el único que corta el bacalao en los despachos de Concha Espina.

Después de haber seguido su comparecencia en la sala de prensa previa al clásico, me solidarizo con el italiano y no descarto iniciar una recogida de firmas en la plataforma 'Change.org' para pedir de forma respetuosa y decidida su continuidad. El Real Madrid necesita a Ancelotti, sin importar que de aquí al final de la temporada el equipo no logre remontar en la Liga ni en la Copa y pinche en la Champions League. Yo le diría a Florentino Pérez que los títulos están sobrevalorados. No son tan importantes. El club madridista tiene muchos, quizás demasiados, en su afamada sala de trofeos. Uno más o uno menos no cambiará la historia.

Estoy convencido de que Ancelotti es el mejor embajador posible del club blanco. Se presenta siempre ante la prensa con una sonrisa, responde a todos con educación y señorío, y es capaz de hacer coña con un cambio de banda de Vinicius y con el atractivo físico de Militao. Solo hay que comparar la elegancia del italiano con la acritud que siempre mostraba en la sala de prensa José Mourinho. Y nadie puede poner en duda su capacidad como técnico, su experiencia y su inteligencia para gestionar las crisis, aunque todos sabemos que el único con voz y voto es Florentino Pérez.