La ausencia de Valdés no está siendo traumática

PULSO TER STEGEN-BRAVO. Luis Enrique tiene las ideas claras y no le tiembla el pulso a la hora de hacer lo que considera mejor para el club. Manda mucho y se nota. Toma decisiones valientes y le salen bien. Es partidario de tener a toda la plantilla activa y hace más rotaciones que nadie. La alineación que presentó en el debut de la Champions es un aviso para navegantes. Tantos cambios hasta ahora solo se hacían en las primeras eliminatorias de Copa. Dar juego a los dos porteros es otra novedad en Can Barça. Cuando la imbatibilidad de Claudio Bravo en la Liga parecía que le aseguraba el puesto, jugó Ter Stegen y la verdad es que sin tener apenas trabajo transmitió muy buenas sensaciones. Está muy atento al juego, es un buen pasador con los pies, da confianza a la defensa y tiene maneras de buen portero. Es difícil decir ahora mismo quién es mejor de los dos, pero la verdad es que nada nos sorprendería que más pronto que tarde el alemán se ganara la titularidad. Lo que parece evidente es que la marcha de Víctor Valdés que fue traumática por la forma, en el fondo no lo está siendo. En este sentido, puede influir poderosamente la seriedad defensiva que intenta imponer el técnico, donde lo más importante no es sacar el balón bien jugado o la incorporación de los laterales al ataque. El técnico asturiano por encima de todo quiere y valora mantener la portería a cero.

LA PROBLEMÁTICA DE XAVI. El miércoles en el Camp Nou vivimos una experiencia interesante. Jugaron codo con codo un chaval de 19 años que desde los seis está en la cantera barcelonista y un veterano de 34 años que tiene el honor de haber vestido más veces que nadie la camiseta barcelonista. Fue un contraste brutal. La experiencia de Xavi frente la juventud de Samper. Y la verdad es que el debutante no solo no desentonó, sino que Luis Enrique contento con su rendimiento le premió con jugar todo el partido. Es un 'Busquets' en potencia. Un todoterreno consistente y con clase que no se encogió en su gran día. A su lado Xavi parecía el maestro, el tutor, el espejo donde tiene que mirarse. Para el de Terrassa esta no será una temporada como las demás. Tiene que ser muy fuerte mentalmente ya que su papel en el equipo será complementario y eso siempre es duro de encajar cuando antes eras imprescindible. Xavi tiene que tener paciencia y tranquilidad. No está para exigir sino para dar. Jugará poco pero su concurso puede ser importante si asume su papel con inteligencia y humildad.