Dos años de Laporta... y 16 meses de Xavi

Joan Laporta, en rueda de prensa

Joan Laporta, en rueda de prensa / VALENTÍ ENRICH

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Hoy se cumplen dos años de la segunda victoria electoral de Laporta. El 7 de marzo de 2021, el ex presidente blaugrana (2003-2010), derrotó ampliamente en las urnas a Víctor Font y Toni Freixa consiguiendo el 54,28 por ciento de los votos. Un triunfo incontestable basado en una campaña ilusionante y con la pancarta del Bernabéu como símbolo del regreso a un pasado glorioso. Dos años después, el segundo mandato de Laporta transcurre entre luces y sombras. Quien diga que Laporta lo ha hecho todo bien miente. Es imposible ser perfecto. Y menos dirigiendo un club como el Barça. El presidente ha conseguido que los socios y aficionados recuperen el orgullo de ser culés después de un triste periodo de decepciones y fracasos. Ha evitado la quiebra financiera de la entidad al mismo tiempo que construía una plantilla competitiva. Y ha iniciado, finalmente, el Espai Barça.

Pero la mayoría de sus decisiones han sido puestas en entredicho por un entorno que está escrutando con lupa su gestión. Se han cuestionado algunos fichajes (por su coste y por su rendimiento), se ha criticado la activación de las ‘palancas’ y la aplicación del dinero generado con las mismas y se han generado dudas sobre la concesión de las obras del nuevo Spotify Camp Nou a la empresa turca Limak. Por no hablar del ‘caso Negreira’, que ha servido para lanzar torpedos a su línea de flotación. Los enemigos del Barça son muchos y poderosos. Y Laporta pelea contra ellos con su personalidad arrolladora, siempre intentando defender los intereses del club. A veces lo hace muy bien y otras muy mal. Lógico. Son mil batallas y no se pueden ganar todas. Aún así, está claro que el Barça está hoy mucho mejor que hace dos años. 

UN EQUIPO DE TRIPLETE

Y hablemos de fútbol. El equipo ha sufrido una transformación absoluta que le permite aspirar a ser campeón. Esta temporada puede conquistar el triplete Liga-Copa-Supercopa que sería un gran éxito viniendo de donde venimos. Pero que, por supuesto, no esconde el fracaso en la Champions y la decepción en la Europa League. Xavi está construyendo un Barça fiable para arrebatarle la hegemonía nacional al Madrid. Está muy cerca de conseguirlo. Otra cosa es la competición continental: allí todavía falta talento y músculo para estar entre los ‘grandes’. Pero desde la llegada del técnico (hace ahora 16 meses) se han dado pasos de gigante hacia la recuperación del modelo y hacia la consecución del éxito. El tándem Laporta-Xavi está funcionando. No tan bien como quisieran todos los culés, pero está funcionando...