Joan Barreda, nueve años de 'maldición' en el Dakar

Barreda llegó al campamento en helicóptero tras abandonar

Barreda llegó al campamento en helicóptero tras abandonar el Dakar / AFP

Josep Viaplana

Josep Viaplana

Un año más, el sueño de Joan  Barreda en el Dakar ha vuelto a truncarse. El piloto de Honda, eterno favorito en el rally, sumó el miércoles, durante la tercera etapa en el desierto peruano, su cuarto abandono de un total de nueve participaciones. 

El quinto puesto en 2017 se mantiene como su mejor resultado en una carrera en la que parecía destinado a consagrarse como el sucesor de Marc Coma y Cyril Despres, los  dos hombres  que durante una década se repartieron la victoria en la categoría de motos, con cinco títulos cada uno.

A sus 35 años, Barreda tendrá ya pocas oportunidades de volver a intentarlo. Pese a ser uno de los pilotos más rápidos y experimentados de los raids, el de Torreblanca puede acabar retirándose sin conseguir el ansiado triunfo en el Dakar.

Hundido Joan explicaba a su llegada al vivac de San Juan de Marcona las circunstancias de su nuevo abandono en el Dakar. Entró en un barranco y no encontró forma  de salir de él hasta que un helicóptero de rescate fue en su ayuda para evacuarle al campamento. “He salido bien. Es un día triste porque había salido muy bien, apretando. He cogido a los pilotos de delante, abriendo pista en las montañas, donde había mucha niebla y casi nada de visibilidad”, señaló.  Barreda cayó en una trampa en el km 143 y quedó atrapado en una hondonada de rocas. “He intentado  girar, dar la vuelta para salir, pero no había forma. Luego fui más abajo para buscar alguna alternativa, pero fue imposible. Me siento muy decepcionado”, se lamentaba el castellonense.

Barreda, que empezó la jornada al frente de la clasificación general de motos, acumula un largo historial de lesiones y incidencias en el Dakar, donde la suerte le sigue siendo esquiva: “Los primeros años me caí mucho, iba muy rápido”,-recordaba-. “Después aprendí a ser más estra tega, pero tampoco pude conseguir lo que buscaba. Hace dos años hice el Dakar perfecto y una sanción al equipo me impidió rematar. Hace tres años se rompió el motor cuando iba líder. Hace cuatro se paró la moto en el Salar... A mi edad creo que aún me quedan un par o tres más de intentos y espero lograrlo”, decía en una entrevista antes de afrontar la presente edición.

Pero tampoco esta vez podrá ser. "Es más amargo este año. El año pasado veía que después de medio año no me recuperaba, y de alguna manera me lo imaginaba, pero este año tenía la sensación de haber hecho el trabajo, y se ha escapado", lamenta Barreda.

"Es duro, la verdad es que en el primer momento no me podía creer que estuviera ahí y no pudiera salir. Es una impotencia muy fuerte", agrega. El piloto castellonense cayó en el barranco cuando seguía la flecha que se había activado en uno de los sistemas electrónicos que le marcaba la cercanía de uno de los puntos GPS ocultos en la ruta que los pilotos deben activar para continuar su camino, ya que de lo contrario son sancionados.

Barreda detalla que ese punto estaba en una zona de altiplano donde había mucha niebla que no le permitía ver ni a dos metros por delante. "Iba despacio porque no veíamos nada. No he podido reaccionar porque no tenía visibilidad", apunta

El piloto de Torreblanca (Castellón) valora que al menos esta bien físicamente "porque podía haber muerto desangrado" si hubiese quedado herido en esa zona a causa de un accidente por la dificultad para acceder.

"En días así , a veces piensas profundamente, y a pesar de no haber ganado y poner todo y que no salga, estoy súper agradecido a lo que me ha dado la carrera. Soy una persona totalmente diferente a la que era hace ocho años", afirma. Ahora Joan se centrará en planificar su temporada de 2019 al encontrarse bien físicamente, no como el año pasado, cuando después del Dakar tuvo que pasar dos veces por el quirófano por dos graves lesiones.

El nuevo golpe moral para Barreda es también un enorme contratiempo para Honda. El español era la principal baza del  equipo  para intentar romper la hegemonía de KTM en el Rally Dakar, cuyas motos han ganado las diecisiete últimas edicionesEl KO de Barreda deja como líder de la formación al  argentino Kevin Benavides, que el pasado año logró finalizar segundo en el podio.