Seguridad vial

Todos los secretos sobre los neumáticos de invierno

Los neumáticos de invierno garantizan unas buenas prestaciones sobre nieve y hielo sin cadenas.

Los neumáticos de invierno ofrecen más seguridad sin la necesidad de montar cadenas.

Los neumáticos de invierno ofrecen más seguridad sin la necesidad de montar cadenas. / MOTOR

Motor Zeta

El verano queda ya muy lejos y en pleno otoño las temperaturas empiezan a caer y la nieve ya ha hecho acto de presencia en varios puntos del país. A partir de ahora, y con el invierno ya en el horizonte, los días cada vez serán más fríos y las lluvias y nevadas más comunes. Es por eso que preparar el vehículo para estas condiciones es esencial para la seguridad del conductor y sus pasajeros, además de la del resto de usuarios de la vía. Por ello, las ventas de cadenas vuelven a subir y, en una tendencia cada vez mayor, las de neumáticos de invierno también se incrementan.

De hecho, los neumáticos de invierno son una gran opción para la estación más fría del año ya que son perfectos para su uso a bajas temperaturas y a fenómenos meteorológicos como la nieve, el hielo o las lluvias fuertes. Entre sus características clave están el aumento de la adherencia sobre superficies mojadas o heladas, la reducción de la distancia de frenado hasta un 35%, una mejor tracción en malas condiciones y temperaturas bajas, un descenso del riesgo de sufrir aquaplaning y la capacidad de circular sobre nieve y hielo sin cadenas.

¿Qué tipos de neumáticos de invierno hay?

Hay cuatro tipos de neumático de invierno para elegir según las necesidades de cada conductor y la zona en la que reside y circula más. En primer lugar, los neumáticos M+S (Mud and Snow) son los más extendidos en España. Estas gomas son indicadas para su uso en carreteras nevadas o embarradas aunque no están sometidos a ninguna norma y no suponen un garantía real de prestaciones en condiciones especialmente adversas. No obstante, son los más vendidos en el país y pueden sacar de un apuro a conductores que no circulen por carreteras especialmente complicadas habitualmente.

En segundo lugar, los neumáticos SPMSF son perfectos para conductores que circulen o residan en lugares con un clima frío exigente. Estas gomas están estandarizadas y controladas por la Unión Europea y son sometidas a rigurosas pruebas que garantizan uns prestaciones perfectas para su uso en condiciones climáticas adversas donde la nieve y el hielo dominan el paisaje durante la mayor parte del invierno.

Los neumáticos de contacto son gomas comunes, sobre todo, en los países del norte de Europa, donde la nieve es parte de la vida diaria de sus habitantes. Estos neumáticos son indicados para su circulación sobre superficies heladas y nevadas gracias a sus excelentes prestaciones en estas condiciones. Cualquiera de estos tres tipos son perfectos cuando las condiciones meteorológicas son malas y la temperatura inferior a siete grados.

No obstante, y por último, los neumáticos ''All-Seasons'' o cuatro estaciones, son una opción muy atractiva para aquellos conductores que vivan en zonas frías pero que no quieren preocuparse por cambiar los neumáticos cada seis meses. Estas gomas están preparadas para su uso en cualquier condición meteorológica y presentan unas buenas prestaciones sobre nieve y hielo, tampoco harán falta cadenas, y sobre el asfalto a altas temperaturas durante el verano. Estos neumáticos son más caros que cualquiera de los otros, pero su inversión se ve recompensada con ahorro a largo plazo al ahorrarse el cambio de gomas cada cierto tiempo.